El gobernador elegido deberá ejecutar con prudencia y continuidad

CARLOS HERNÁNDEZ

LA PATRIA | MANIZALES

En tiempos en los que el país ha vuelto a discutir lo corto que puede resultar un periodo de cuatro años para un mandatario, que un gobernador cuente apenas con dos años y tres meses no resulta más que desalentador. Ese es el posible escenario que deba enfrentar el sucesor de Guido Echeverri que resulte electo en las próximas elecciones.

Hasta ahora se discute la terna para enviarle al presidente de la República, de la cual saldrá quien asuma como encargado mientras se convoca a elecciones.

Si se toma como ejemplo el reciente caso de Huila, donde el 10 de diciembre del 2012 destituyeron a la gobernadora, se tiene que el 15 de febrero del 2013 el Gobierno Nacional convocó las elecciones para el pasado 14 de abril. Es decir, hubo unos cuatro meses entre la salida de la mandataria y la elección del sucesor.

Si en Caldas ocurriera algo similar, el nuevo gobernador sería electo en septiembre, y tendría dos años y tres meses de gobierno. Deberá liderar la formulación de un nuevo plan de desarrollo y lidiar con las restricciones en contratación que estipula la Ley de garantías en el periodo previo a la elección de presidente de la República, y que comienzan a regir el 25 de enero del 2014 y van hasta el 25 de mayo de ese año, día de los comicios, o incluso se extenderían más en caso de que haya segunda vuelta.

LA PATRIA consultó a tres exgobernadores de Caldas, un exalcalde de La Dorada que llegó al cargo tras elecciones atípicas, un exalcalde de Manizales que gobernó por dos años y medio, y al director de la Corporación Cívica, para preguntarles en qué se debe enfocar quien gane las próximas elecciones y asuma el reto de gobernar en tan poco tiempo. La conclusión, más allá de tecnicismos, es que debe ser prudente y concreto para proponer e invertir, y continuador de las políticas de Echeverri.

Emilio Echeverri

Gobernador en el periodo 2004-2007

"Se debe buscar una persona que mantenga la confianza que había generado el doctor Guido Echeverri, de buenas condiciones morales y que no despierte sospechas, para que termine bien. En la medida en que los partidos que apoyaron su elección son los que definen los encargos, una forma práctica es la continuación de los programas meritorios. Pero ante todo, que mantenga la confianza".

Luis Alfonso Arias

Gobernador de Caldas en el periodo 2001-2003

"El gobernador que entre para estos dos años y medio tendrá unos elementos adversos para desarrollar una buena gestión. En primer lugar, el plan de desarrollo, deberá hacerle unos ajustes. Eso le tomará un tiempo. En segundo lugar, tendrá una limitante como la ley 550; y la ley de garantías lo limitará el radio de acción. Por eso debe ser un gran gerente para Caldas, con muy buen soporte técnico y, por supuesto, con buena aceptación. El doctor Guido inició una buena gestión y tuvo muy buena aceptación en los sectores político y privado. Ese es un ingrediente que debería tener continuidad. No obstante, el nuevo gobernador vendrá nuevas ideas".

Gerson Bermont

Alcalde de La Dorada entre junio del 2010 y diciembre del 2011. Llegó por elecciones atípicas.

"Es una situación totalmente inconveniente para la institucionalidad y el rumbo del departamento, porque cuando uno llega en condiciones atípicas se convierte en un gobernante de pendientes, que no alcanzará a consolidar nada. La Ley de garantías lo limitará mucho, pues normalmente uno se prepara para eso con una buena planeación, pero en este caso no habrá tiempo suficiente. El elegido deberá decirle no al sectarismo, y más bien apostarle a la construcción colectiva y darle continuidad a las políticas y programas que se venían aplicando. En ningún caso tendría lógica cambiar de tajo lo que se viene haciendo. Debe ser muy realista y concreto en sus propuestas: tres o cuatro que recojan lo que más haya avanzado el gobernador. Tendrá que tener en cuenta que las mayores dificultades son fiscales. En conclusión, el mejor asesor que puede tener el nuevo gobernador es el propio Guido Echeverri".

Francisco Prieto

Gobernador encargado entre octubre y diciembre del 2011, tras la suspensión de Mario Aristizábal.

"Por pragmatismo y conveniencia se debe continuar con el actual programa de gobierno, que fue el que aprobó la ciudadanía. No puede ofrecer el oro y el moro, pero hay aspectos cruciales. Uno, Aerocafé. Deberá mantener la convocatoria a los gremios, parlamentarios y demás fuerzas vivas para sacarlo adelante. Dos, la Licorea requiere una cirugía abierta y el nuevo gobernador deberá dejar sentada una política pública para rescatarla. Tres, con Empocaldas deberá focalizar su gestión en sanear las redes, que están muy viejas y para lo cual no se requieren recursos extraordinarios. Cuatro, la gestión de regalías para continuar con el Plan Vial. También deberá mantener la gestión por Miel II y sintonizarse con los programas de inversión del Gobierno Nacional".

Luis Roberto Rivas

Alcalde de Manizales entre mediados del 2005 y diciembre del 2008

"Debe focalizar y priorizar, sin dejar de lado lo que el anterior gobernador haya comenzado, para no partir de cero. Si puede mantener el equipo de trabajo, mucho mejor. Si hace planteamientos serios que tiendan a la continuidad de lo que hizo Guido, la estrategia puede dar resultados en ese corto periodo. Hay que tener en cuenta que la campaña será muy difícil por tratarse de una elección atípica en la que no habrá mucha gente jalando, y habrá tendencia a la abstención.

Luis Fernando Mejía, director Corporación Cívica de Caldas

"Está claro que el nuevo mandatario traerá un programa de gobierno nuevo, pero lo recomendable es que quienes sean candidatos presenten propuestas que vayan en pro de la continuidad a lo que ya esté andando y tenga el aval de la ciudadanía. El departamento ya está comprometido con grandes proyectos como Aerocafé. El elegido deberá ser supremamente cauto en que las propuestas se ajusten a realidades como las que imponen la Ley de Garantías".

Después de la convocatoria

La Ley 1475 establece que una vez el Gobierno nacional convoque nuevas elecciones, "el periodo de inscripción durará 15 días calendario contados a partir del día siguiente de la convocatoria". También, que la votación se hará 40 días calendario después de la fecha de cierre de inscripción. "Si la fecha de esta votación no correspondiere a día domingo, la misma se realizará el domingo inmediatamente siguiente".