ALEJANDRA CASTAÑO ALZATE
LA PATRIA | MANIZALES
Laura Toro Salazar es una sicóloga de 22 años que canta desde los cuatro. Aunque su lugar de origen es Pensilvania (Caldas), se desplazó hasta Manizales hace cinco años para estudiar en la universidad. Inició la formación musical con su padre, Omar de Jesús Toro Franco, integrante del dueto Candilejas y grabó su primer disco, con disco, con 11 temas, cuando era una quinceañera.
Su cuna, Confamiliares y la Orquesta Juvenil Batuta del municipio de donde es oriunda. Sus primeros pasos, los festivales musicales de Norcasia, Manzanares y el de la Escuela Normal Superior de La Presentación de Pensilvania, donde terminó el bachillerato.
En 2011 participó con Ensamble Vocal Femenino de la Fundación Auros en el Festival del Pasillo de Aguadas y ha obtenido reconocimientos en otros festivales como el Nacional Interuniversitario de Música Tradicional de Armenia (Quindío), el de la Canción que se realiza la Universidad de Manizales, el XXXlV Nacional y en Festivoz de Manizales.
“Quería foguearme en otros festivales y hacerme una carrera larga antes del Mono Núñez”, dice Laura Toro y reconoce que no se había atrevido. “Siempre lo había conocido, pero a penas este año me postulé. Presenté la audición el 12 de abril en una de las salas del Teatro los Fundadores”.
Comenzó a cantar en el lugar y le grabaron un video que mandarían a los jurados. Manifiesta, con la mano en el pecho y aún con cara de asombro: “En serio, no pensé que fuera a pasar”. Sin embargo, una semana después recibió un correo de la Fundación Pro Música Nacional de Ginebra (Funmúsica) en el que le confirmaban que había sido seleccionada para participar en la versión 2015 del Festival de Música Andina Mono Núñez.
“Voy acompañada con La Cuestión de Pereira porque, además de ser requisito ir con un grupo, sentimos mucha conexión”, expresa la cantante. También estarán con ella su papá, su mamá, sus tíos y otras personas. “A veces se me acercan y no los conozco, me saludan, me dicen que me van a apoyar y que allá nos vemos”, se ríe.
Tiene talento y guarda la ilusión de ganar, pero tampoco lo creería. “Quiero ir a conocer y a aprender mucho de otros músicos. Quiero observar y aplicar esas cosas a mi formación”, puntualiza.
Uno de los requisitos es llevar 11 temas preparados
El Obligatorio: “Rondel de Espinosa y Bedoya. El guitarrista Jorge Mario Quintero y yo le hicimos arreglos para la presentación”.
Audición pública: Que me juzgue Dios de Graciela Arango y El beso que le robé a la luna de Luis Enrique Aragón”.
La final: “Contradicciones de Sonia Martínez y Decir adiós de María Isabel Saavedra”.
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