EFE|LA PATRIA|BUENOS AIRES
El ministro de Planificación argentino, Julio De Vido, viajó ayer a Brasilia para reunirse hoy con su homólogo de Energía de Brasil, Edison Lobao, y la presidenta de Petrobras, María das Graças Foster, para avanzar en proyectos de inversión de la estatal brasileña en Argentina.
El encuentro fue acordado el 10 de abril pasado durante una reunión que De Vido mantuvo con directivos de la filial argentina de Petrobras y funcionarios de Neuquén tras la decisión de esa sureña provincia de quitar a la petrolera el área de explotación de hidrocarburos Veta Escondida.
El Ejecutivo neuquino había argumentado para tomar esta determinación, una semana antes, que ese yacimiento permanecía sin producción y con inversiones insuficientes, extremo que fue negado por la petrolera.
Aquel encuentro también precedió a la decisión del Gobierno argentino, anunciada el lunes último, de intervenir la petrolera YPF y comenzar el proceso de expropiación del 51 por ciento de las acciones que están en manos del grupo español Repsol.
De Vido ha sido designado interventor de YPF, secundado por el viceministro de Economía, Axel Kicillof.
El dictamen de expropiación de YPF fue aprobado esta semana por las comisiones del Senado argentino y pasará al pleno de la Cámara Alta el próximo miércoles, para posteriormente ser enviado a la Cámara de Diputados.
La canciller mexicana, Patricia Espinosa, aseguró ayer que su país aún no tiene "oficialmente asignado" el papel de mediador en el conflicto desatado por la decisión argentina de expropiar las acciones de Repsol en la petrolera YPF, si bien está dispuesto a asumirlo.
En conferencia de prensa en la capital mexicana, Espinosa recordó que en la VI Cumbre de las Américas celebrada en Cartagena el fin de semana pasado ya había declarado que México está en disposición de ayudar para encontrar una solución.
"En el tema de la mediación (...) dije que habíamos recibido del Gobierno de España" la solicitud de ayuda para "encontrar el diálogo y entendimiento" en el caso de YPF, y, apuntó, "me limité a señalar que por supuesto estábamos dispuestos a hacerlo".
Sin embargo, precisó que "de ninguna manera" eso quiere decir que México ya tenga oficialmente asignado ese papel. "Simplemente", explicó, "que estábamos dispuestos a atender una petición que nos hizo un país amigo".
El Gobierno español dijo el viernes pasado que había acudido a instancias internacionales para abordar el tema de YPF y, específicamente, que había pedido la colaboración de México en su calidad de presidente de turno del G20.
Esta semana, el secretario mexicano de Economía, Bruno Ferrari, dijo que "habrá un diálogo con España para ver qué se espera de México y ver qué actividades podría hacer".
"España puede platicar directamente con Argentina en estos temas. Si está pidiendo la intervención de México, habrá que ver cómo", añadió.
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