Actuaban en el Quindío y los veían en México

LA PATRIA | MANIZALES

Un viaje por el teatro dejó tantos recuerdos que fueron escritos. El lanzamiento del ejemplar Huellas Digitales, Performance Digital lo presentaron el pasado jueves en la Feria del Libro, en la Universidad de Caldas, sede Palogrande.

El libro es el producto del proyecto con el mismo nombre. Reúne las memorias de un año del trabajo del colectivo Andromeda 3.0 de la Universidad de Caldas y jóvenes del Centro del Menor Infractor La Primavera, en Montenegro (Quindío). Ellos participaron en obras teatrales durante el año pasado en Colombia y en Puebla (México).

Daniel Ariza, director del proyecto Huellas Digitales, expuso las tres partes en que se divide el libro.  

Momentos

Memorias desde el exterior: que comprende reflexiones de los artistas al frente del proyecto.

Memorias desde el interior: relata cómo actuaron los jóvenes desde el Centro del Menor Infractor y cómo los veían en otras ciudades por medio de cámaras y de holografías, método que utiliza la luz para crear imágenes en tercera dimensión, haciendo parecer que los actores están en escena.

Reflexiones: la última parte del texto contiene artículos que hicieron los espectadores.

“El concepto de presencia es trabajado por nosotros. La virtualidad permitió que actuaran en tiempo real y los vieran en otros escenarios. Hay un mecanismo de libertad a través del uso de las nuevas tecnologías”, indicó el director.

Entre los asistentes estuvieron los docentes y críticos Rubén Darío Zuluaga y José Wilson Escobar quienes ofrecieron sus conocimientos sobre el teatro, artes escénicas y las nuevas tecnologías.

Escobar afirmó que el teatro está poetizando las prácticas tecnológicos y se refirió a Othelo, la obra presentada por la compañía Buendía Theatre (Argentina) en el Festival Internacional de Teatro de Manizales.

“La cámara, con la que los personajes se autograban y registran la muerte en vivo, opera como otro personaje, como otro elemento narrativo que acerca al espectador, quien debe tomarlo como un relato paralelo y olvidarse de que está digitalizado”, ilustró.

El conversatorio concluyó con que hoy el teatro está demostrando que la tecnología puede ser narrada y transformada en la escena, en función de la forma en que el público esté interactuando con ella.

En el conversatorio participaron docentes y el equipo de trabajo.