Jhon Jairo Martínez
LA PATRIA | MANIZALES
Diariamente millones de usuarios en el mundo se conectan a internet. Ahí están los videos en YouTube, las consultas en Wikipedia, los amigos en las redes sociales y prácticamente la vida de los internautas en trillones de páginas web a las que se puede acceder a través de un navegador y Google.
Hasta ahí no hay nada raro, pero ¿qué tal si se diera cuenta que debajo de esa web que se conoce, hay todo un inframundo cibernético donde se alojan páginas tan oscuras como para traficar con órganos, niños o manuales para cometer asesinatos? y que además ¿sus hijos pueden acceder a él? Aunque para muchos estas afirmaciones hacen parte más de la mitología que rodea esta web profunda, lo cierto es que hay archivos y páginas que nadie conoce y que poseen información ilimitada. Pero también, hay grandes riesgos de seguridad que pueden vulnerar al usuario y ponerlo en alto riesgo.
No todos los usos de la Deep Web son ilegales, en determinados países donde se suelen aplicar
censuras en los medios de comunicación, o bloquear la comunicación con el exterior, la internet profunda se convierte en una herramienta para que los corresponsales de prensa y otras personas puedan acceder a información.
En pocas palabras los que se conoce como la Deep Web, no es más ni menos que la mayor parte de lo que se denomina como internet y hace referencia al 95% de su contenido. Esta web está compuesta por sitios, portales, servicios y material que no está indexado por los motores de búsqueda como Google, Bing y otros. Esto permite a sus creadores mantenerse anónimos.
Según los expertos la Deep Web es 500 veces mayor que la red superficial y para acceder, el usuario no lo hace por un navegador normal, como Chrome o FireFox, para esto debe instalar una nueva aplicación llamada Tor.
LA PATRIA habló con Pablo Ramos, especialista en seguridad informática de ESET en Argentina, quien explicó qué es la internet profunda y los riesgos.
Parte de la Deep Web la componen los pseudodominios que se utilizan con el objetivo de
facilitar el acceso anónimo a páginas que abarcan distintas temáticas como abusos, venta de estupefacientes, foros de cibercriminales y otros temas generalmente ilegales o que traspasan la barrera de lo ético y legal.
Tor (The Onion Router, https://www.torproject.org/)) es una red de túneles virtuales que permite a personas y grupos mejorar su privacidad y seguridad en Internet. Esta es una de una de las herramientas más utilizadas para la anonimización en línea. También brinda a desarrolladores la posibilidad de crear nuevas herramientas de comunicación con funcionalidades de privacidad incluidas, y provee una base para una variedad de aplicaciones que permiten que empresas e individuos compartan información en redes públicas sin comprometer su privacidad.
Tor esconde el origen y el destino de todo el tráfico que genera porque no revela la dirección IP y, además, mantiene la integridad y el secreto de la información que viaja por ella. Por este motivo se dice que esta tecnología pertenece a la Deep Web o Internet profunda, aquella que abarca el contenido en Internet que no forma parte de la superficie, es decir, sitios y contenidos que no son indexados por los motores de búsqueda tradicionales como Google.
Tor, viene con un navegador basado en Firefox que se adaptó para funcionar con esta herramienta de anonimización. Una vez que el usuario se encuentra conectado a Tor su identidad puede
permanecer anónima, y ahora, para acceder a la Deep Web necesita conocer de un punto de
entrada, normalmente un dominio (.onion) al que solo se puede acceder cuando se está conectado a
esta red.
Dentro de todo el material que se aloja en la Deep Web, se pueden encontrar páginas privadas, sitios de compra y venta de armas, drogas, y una larga lista de material ilegal que no se encuentran en la red superficial. Además, es posible encontrar sitios con contenido de pornografía infantil y muchas cosas más. El motivo por el cual este contenido se aloja en la Deep Web está relacionado con su origen y los usos que se les suele dar.
En primer lugar, la inseguridad de la Deep Web está relacionada con que nadie regula o controla el contenido que en ella se aloja, y es más que probable encontrarse con sitios que alojan malware o diferentes amenazas que atentan contra la seguridad y privacidad del usuario. Sin embargo, este tipo de amenazas también se ven en la Web superficial, con la sutil diferencia de que mucho del contenido de la Deep Web es ilegal y está penado por la ley en muchos países.
No es recomendable para los usuarios navegar en sitios donde suelen encontrarse cibercriminales, traficantes de drogas y pedófilos ya que podrían verse involucrados en problemas legales.
Existen sitios de la Deep Web que no son peligrosos y que no presentan ninguna amenaza para el usuario. No se recomienda conectarse a Tor ni acceder a la Deep Web desde la misma computadora que se utiliza todos los días, ya que cualquier amenaza que atente contra la seguridad del equipo podría exponer datos privados del usuario o convertir su computado en parte de
una botnet (volverlo un robot que es manipulado de forma remota por un delincuente que puede hacer con su computadora lo que desee).
No existe ningún motivo para que un usuario acceda a la Deep Web. Si bien a muchos usuarios les puede dar curiosidad cuál es el contenido que se aloja en ella, no hay una razón directa para que deban hacerlo. De todos los servicios que los usuarios suelen utilizar, ninguno se aloja en la Deep Web.
La Deep Web utiliza los mismos protocolos de comunicación que la red normal, y el contenido se accede a través de HTTP, HTTPS, FTP u cualquier otro protocolo de comunicación que se vea en la Web Superficial. La herramienta que sí utiliza un protocolo de comunicación diferente es Tor, y ello tiene que ver con la forma como funciona y sus capacidades para garantizar la navegación anónima.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015