LA PATRIA | MANIZALES
Ricardo Enrique González Tovar, el hombre que en el 2011 asesinó a sus dos hijas y dejó malherida a quien era su esposa en la época de los hechos, en Puerto Salgar (Cundinamarca), quedó en libertad por orden de un juez de La Dorada.
La defensa alegó vencimiento de términos, pues aún el Tribunal Superior de Manizales no falla en segunda instancia.
Voces
El defensor del homicida, César Augusto López, señaló que se apeló de la decisión, tras la sentencia del 29 de abril del 2015, con la que se le ordenó a su cliente a pagar 45 años de prisión por homicidio agravado y tentativa de homicidio agravado.
Añadió que no se pretende desconocer el delito que cometió González Tovar, pero sí que lo reconozcan como inimputable, que merece un tratamiento psiquiátrico y que lo recluyan en un centro especial para enfermos mentales.
"El 7 de mayo del 2015 apelé, el caso se fue para el Tribunal y este es el momento que no se han pronunciado. El año pasado salió la Ley 1786 y estableció que las medidas de aseguramiento no pueden prolongarse más de un año", relató López.
Según el abogado, hay soportes científicos sobre el deterioro mental de su cliente, originado por una depresión profunda. Sostiene que en el momento de la agresión sufría un trastorno e intentó suicidarse.
Lo tuvieron detenido en la cárcel La Picota y fue necesario ingresarlo al patio de enfermos mentales. Atentó en repetidas ocasiones contra su vida, lo que provocó su traslado a instituciones especializadas. Hoy, en libertad, permanece internado en una.
López sostiene que la Ley 1786 se expidió para evitar una excarcelación masiva el año pasado. "Estableció una causal de libertad cuando se cumplan 150 días desde el inicio del juicio y no se haya producido sentencia".
En caso de que el Tribunal determine la inimputabilidad de González Tovar, el abogado solicitaría que lo recluyan en un establecimiento psiquiátrico oficial con una medida de aseguramiento de 10 años. De ratificarse la pena, el caso podría pasar casación ante la Corte Suprema de Justicia.
La víctima
Luz Stella Forero, exesposa de Ricardo Enrique, publicó un mensaje para la opinión pública. Recordó que vivía en habitaciones separadas desde hacía dos años con este hombre. En la mañana de la agresión le pidió una última oportunidad, ante lo que ella se negó y le respondió propinándole 26 puñaladas.
Sofía, de 10 años, y Natalia, de 15, salieron a defender a su madre, pero la pequeña murió, mientras que la señora y su otra hija escaparon malheridas mientras él atentaba contra su vida. En el hospital falleció la mayor.
Luz Stella relató que denunció ante la Comisaría de Familia los maltratos y amenazas de Ricardo, pero nunca lo citaron.
LA PATRIA intentó obtener respuesta del Tribunal, pero respondieron que es necesario enviar un oficio al Palacio de Justicia.
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