LA PATRIA | MANIZALES
Las huellas de la muerte de Humberto Tabares, de 55 años, llevaron a las autoridades a señalar e imputar por el homicidio a un hermano y a un sobrino de la víctima. El hecho ocurrió en septiembre pasado.
La Policía capturó a los presuntos agresores (padre e hijo) en Marmato, municipio donde mataron a Tabares, a quien apodaban el Quemado. El comandante de la institución en Caldas, coronel Lincon Borja Miranda, manifestó que el hecho se produjo por un conflicto de tierras.
“En coordinación con la Fiscalía logramos identificar e individualizar a estas dos personas, que tienen en común ser familiares de la víctima”.
Inicialmente indicó que se trató de un caso de intolerancia, que surgió en la familia por disputas que no fueron conciliadas y que determinaron el desenlace fatal para Tabares.
Todo se inició por una disputa de tierras y ganado, situación que se acrecentó y culminó mal. El comandante de la Policía de Caldas agregó que el autor material presuntamente fue el sobrino, instigado o ayudado por su padre, es decir, el hermano de la víctima.
El hecho
A Tabares lo asesinaron en la vereda Bellavista. El homicida, al parecer, lo esperó en un matorral frente a una pesebrera y le disparó en el pecho. Murió en el lugar.
El Quemado se dedicaba a la arriería, pero eventualmente transportaba madera o minerales a los molinos. El lugar donde lo asesinaron está a media hora del casco urbano.
Al padre le dieron domiciliaria y al hijo lo mandaron para la cárcel.
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