LA PATRIA | MANIZALES
"Tras las entrevistas vienen informaciones que nos servirán mucho", le expresó ayer a LA PATRIA el teniente coronel Gerardo Avilán Villalba, comandante del Batallón Ayacucho, tras hablar de la entrega a esta guarnición militar de tres guerrilleros del Eln, asentados en el Chocó.
Se trata de un cabecilla, alias Coco; y una pareja de armados rasos, quienes dejaron las armas y llegaron con un bebé de seis meses.
"Hacían parte del frente Manuel Hernández el Boche. Decidieron dar un paso adelante, resocializarse, volver a la vida. Por seguridad, ellos prefirieron hacerlo en Caldas. La fuente, que trabaja con las agencias de inteligencia del Ejército, tomó contacto con ellos y los trajo hasta la Terminal de Transportes de Manizales. Ahí se adelantó el procedimiento con el CTI. No tenían armas", explicó Avilán Villalba.
La pareja llevaba dos años y medio en la estructura armada, y Coco era cabecilla de las milicias en Bagadó (Chocó) hace año y medio.
"Los entrevistaremos para conocer a profundidad qué los llevó a desertar y obtener información que nos sirva para futuras operaciones. Los verán los médicos y los entregaremos al Grupo de Atención Humanitaria al Desmovilizado. No tenemos información de que ese grupo quiera entrar a Caldas. Conocemos de un corredor que ha sido histórico, que viene de Chocó, pasa por Mistrató, Guática, Quinchía, Riosucio, área donde nos han alertados que ven a dos o tres personas, pero de los que estamos muy atentos. Luego pasan a Antioquia", concluyó.
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