LA PATRIA | MANIZALES
Una noticia conmocionó el sábado a los pacoreños cuando se enteraron de la muerte de Paula Andrea Zapata, de 17 años , y del secuestro de su hijo de dos meses.
La Policía encontró ayer en la noche al niño en Chinchiná, en manos de la supuesta asesina y secuestradora.
Según relataron los familiares de la joven, todo empezó el viernes en la mañana cuando ella salió a la calle con su bebé, de dos meses, y su pareja.
Según relató su compañero sentimental, ese día en el parque se le acercó una mujer de tez morena y le manifestó que tenía ropa para regalarles a ella y a su hijo, pero él se fue para otra parte. Siguieron hacia un hotel ubicado en la calle 7 entre carreras 2 y 3.
Llegó la noche y Paula y su hijo no aparecían. La familia, preocupada, dio aviso a la Policía e iniciaron las labores de búsqueda. Ingresaron a la habitación del hotel que le asignaron a la supuesta asesina y secuestradora y el sábado en la mañana encontraron a la joven debajo de una cama, sin signos vitales y con señales de estrangulamiento.
El secretario de Gobierno de Pácora, Manuel Alejandro Acosta, manifestó su preocupación por el hecho, pues contó que esto es algo por fuera del acontecer del municipio.
Es de Chinchiná
Una familiar de la presunta secuestradora se acercó ayer en la tarde a la Estación de Policía de Chinchiná a poner la denuncia por pérdida de documentos y relató que su hermana le había robado la cédula y la estaba suplantando. En medio del llanto contó que hacía 20 días se fue de su casa ubicada en el barrio La Esperanza, a dos cuadras de la sede del Banco de Bogotá.
Añadió que se iba a vivir con un compañero en un municipio del norte de Caldas, y que a los pocos días regresó con un bebé de pocos meses de nacido de piel trigueña.
“Comenzamos a sospechar porque él niño no se parecía a ella. Además no presentaba signos de haber estado en embarazo. Al primer marido le hacía creer que estaba esperando bebé, mostraba barriga y todo”, expresó.
Un hombre que acompañaba a la familiar de la sospechosa llamó a la madre de la presunta secuestradora y le comentó sobre la gravedad de lo sucedido. “Esa boba fue, se embaló, si la cogen le van a meter varios años de cárcel”, susurraba.
De la sospechosa se sabe que trabaja lavando ropa en casas de familia, tiene tres niños y se presume que el sábado en la mañana huyó junto con el bebé.
La Policía Caldas dispuso 100 uniformados de la unidad de investigación criminal, inteligencia y de apoyo y el Gaula para la investigación con la que dieron con el paradero del bebé y su captora.
Sin cámaras
El hotel no tiene cámaras de seguridad, la Normal San José que queda al frente tiene cámaras de seguridad, pero están en mal estado, mientras que otros hoteles del municipio sí cuentan con cámaras de seguridad en sus exteriores e interiores.
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