LA PATRIA | MANIZALES
Piedras en el zapato de la justicia siguen apareciendo para definir la responsabilidad de miembros del Ejército en las ejecuciones de 96 personas en Caldas, a quienes hicieron pasar por miembros de grupos armados ilegales y de bandas criminales.
La razón: defensores de los involucrados piden que los juzgue la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Ayer se tenía planeada la acusación contra nueve militares del Batallón Mártires de Puerres, por los homicidios de cinco hombres y una mujer en la carretera entre la Quiebra del Billar y El Chuzo, de Manizales, en el 2008, a quienes hicieron pasar como miembros de una banda criminal.
De los militares señalados, solo uno asistió, pese a que se comprometieron a ir. Enfrentan cargos por homicidio agravado y concierto para delinquir.
Jorge Molano, abogado de víctimas, rechazó la solicitud de que los juzguen por medio de la JEP. Recalca que el crimen no se dio en medio del conflicto armado, no existe compromiso de los militares con la verdad y la Jurisdicción no se ha reglamentado.
Añadió que espera que la justicia les imprima celeridad a los procesos y sancione las prácticas dilatorias.
"Si ellos tienen compromiso con la verdad, ¿por qué no vienen a decirla? Hay un compromiso con evadir la justicia y seguir ejerciendo cargos de poder dentro del Ejército. La sociedad colombiana está en riesgo", sentenció Molano.
Relacionados con otra ejecución
Mártires de Puerres, a la unidad que pertenecían los militares sindicados, es la misma a la que señalan de cometer tres homicidios en la vereda La Java, de Manizales. Ya condenaron a siete integrantes.
En Bogotá se adelanta el juicio contra el comandante del Batallón, el mayor Josué Yobanny Linares Hernández; el capitán retirado Julio César Álvarez Pedreros y el reclutador Juan Carlos Arenas, de la oficina de Envigado.
Así mismo llamaron a declarar a los generales Emiro José Barrios y Jorge Enrique Navarrete, y al general retirado Mario Montoya Uribe, a quienes les podrían imputar cargos.
Amenazas persisten
La familia de una víctima del caso de La Java sigue recibiendo amenazas. Molano señaló que las autoridades omite la protección de las víctimas.
Inocentes
Las seis víctimas venían a Manizales, al parecer, en plan de turismo. Los militares los engañaron y los hicieron desviar por una carretera, en donde los atacaron.
En el sector no había denuncias por posible presencia de delincuentes, algo que en el día de los hechos aseguró Emiro José Barrios. Les plantaron como evidencia cinco revólveres y una pistola.
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