Ante un juez de garantías de Manizales, a puerta cerrada, realizan en este momento la legalización de la captura del padrastro de los niños Mateo y Carlos Andrés Agudelo, de 8 y 10 años. Los menores serían los cuerpos que rescató un campesino en aguas del río Cauca en Sabanalarga (Antioquia).
El hombre se llevó a los niños sin consentimiento de la madre, Ana Isabel Sánchez, quien estaba en Medellín en donde recibió un mensaje de texto que decía "le voy a dar donde más de duele".
Los cuerpos de los menores aún no llegan hasta Medellín para su plena identificación.
Por su parte, el director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar Regional Caldas, Luis Eduardo Céspedes de los Ríos, emitió un comunicado en el que rechaza "el presunto asesinato de los niños Mateo y Carlos Andrés Agudelo".
Agregó que: “tenemos que hacer un alto en el camino y reflexionar sobre hechos como los ocurridos en las últimas horas en Caldas. La sociedad no puede convertirse en cómplice de los abusadores y asesinos, si los niños y niñas necesitan de nuestro apoyo y las denuncias sobre su condición vulnerable, debemos actuar, no nos podemos quedar callados ante las infamias, o esperando que un hecho lamentable ocurra”.
Indicó que los profesionales del ICBF brindan todo el apoyo psicosocial a las familias afectadas y a su familia extensa.
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