LA PATRIA | Manizales
Guillermo Álvarez Castrillón, caldense de 50 años, se salvará de la pena de muerte en China. En el 2010 lo detuvieron en el aeropuerto internacional de ese país por tratar de entrar cinco kilos y medio de cocaína. La sentencia se la cambiarán por cadena perpetua.
Mónica, hermana del detenido, comenta: “El domingo me llegó un correo de un funcionario del Consulado de Colombia en el que me informaba que le cambiarían la pena a Guillermo, pero que aún no se había enviado la solicitud por escrito".
Según el personero de Manizales, Juan Carlos Pérez, Guillermo llevaba la droga repartida en el cuerpo. Explica que el preso tiene un derecho a reconsideración, el cual se debe definir este mes en el sentido de aplazar o cambiar la condena.
La hermana agrega: "En este momento tengo sentimientos encontrados. Me da alegría saber que le respetaron el derecho a la vida, pero nos sentimos tristes porque estará preso. Tenemos esperanza de que con el tiempo los gobiernos y las leyes cambien en beneficio de ellos".
La familia también se aferra a que en ese país cada dos años evalúan las penas, por medio de un sistema de puntos para que los presos bajen sus condenas por buen comportamiento.
“Hablé con Guillermo hace dos meses y medio, me dijo que estaba convencido de que no lo iban a matar porque lleva un buen comportamiento dentro del penal y eso ellos lo ven”, manifestó.
Claves
Ella agrega que en la búsqueda de cambiar la decisión han sido fundamentales las cartas enviadas al Ministerio de Relaciones Exteriores en Colombia, la Presidencia de la República, la Defensoría del Pueblo, la Federación Nacional de Personeros en Colombia, la Procuraduría General de la Nación, la Embajada y Consulado de Colombia en China y al Embajador de China en Colombia.
En los mensajes escritos, la Personería, familiares y amigos manifestaban que fueran más benévolos con la pena y que tuvieran en cuenta que Guillermo era una persona sin antecedentes penales en Colombia.
Sabía lo que hacía
Según el personero, al preguntarle a Guillermo el porqué se había ido, este le respondió que por la falta de oportunidades laborales en Colombia para educar a sus dos hijos.
Además, le dijo que él era consciente de la droga que llevaba y de la pena que podía cumplir. “Él sabía que se iba de mula para China y que le daban cárcel por el delito que estaba cometiendo, pero que donde hubiera sabido que eso allá era pena de muerte no se involucra”, puntualizó.
Mónica añadió que tiene la oportunidad de comunicarse con su hermano vía telefónica cada fin de mes para saber cómo esta. "Él me dice que el trato es digno, pero que la alimentación y el idioma le han dado muy duro por el cambio de cultura, horarios y por la disciplina tan rigurosa que tienen", dijo.
Sostuvo que el Consulado de Colombia en China lo visita cada dos meses para ver como se encuentra físicamente y darles información a sus familiares.
Mandarín
Asimismo, explicó que su hermano tiene un abogado de oficio que habla mandarín y que por ley en las audiencias debe haber un traductor para que Guillermo entienda y conozca en qué va su caso.
El personero afirmó que el detenido, nacido en La Merced, ha tenido la oportunidad de capacitarse, pero que pide intervención de la Embajada para que lo doten de elementos de aseo, debido a que otros detenidos oriundos de otros países, reciben esa ayuda y él no.
Añadió que la Personería va a seguir trabajando con la familia de Guillermo y que no han tenido más contacto con la Embajada porque según el personero, todo pronunciamiento que se haga al respecto a los detenidos se da a través de la Cancillería colombiana por medio del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El dato
En la República Popular China las condenas por tráfico de drogas son de pena de muerte y cadena perpetua.
Recogerán firmas
Mónica Álvarez Castrillón afirmó que hay por lo menos 100 familias en la misma situación y por ello están recogiendo firmas para que los gobiernos hagan un tratado de repatriación.
Desde la Embajada
Carmenza Jaramillo, embajadora de Colombia en China, le dijo a LA PATRIA que es cierto que Guillermo ya no tiene pena de muerte, sino cadena perpetua, pero que el cónsul solicitó el fallo, pero aún no les llega.
"Ya visité a Guillermo, a quien vi tranquilo, lleno de esperanza y decidido a aprender mandarín. Nos contaron que nuestra visita y la conversación con él, que fue escuchada y reportada por los cuatro oficiales que nos acompañaron, se tuvo en cuenta para beneficiar a Guillermo, razón de más para alegrarnos", concluyó.
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