LA PATRIA | MANIZALES
La historia de Jeisson David Mendieta Parra es de superación. “Era suboficial del Ejército y en cumplimiento del deber me cayó, en la parte de atrás, una granada de mano. Perdí mis dos piernas. Pero hoy soy deportista de alto rendimiento en esgrima y represento a Caldas. La vida sigue, no decaigamos por nada. Entre más dura sea la vida, más fuerte tenemos que ser”, contó el uniformado, quien participó en la conmemoración del Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las víctimas en el departamento, que se cumplió en el Batallón Ayacucho, el viernes.
Y anotó: "Dios siempre dará las batallas más difíciles a los mejores soldados. Regresé a Manizales después de rehabilitarme en el Batallón de Sanidad en Bogotá y desde ese momento el Ayacucho me acogió, me acompaña y ahora estoy de pie, con muchos sueños”.
También se honró la memoria del coronel Juan Ricardo Muñoz Ayala, quien ofrendó su vida por la paz de Caldas. Lo asesinaron en mayo del 2007, en el oriente de Caldas, tras unos disparos de la Farc al helicóptero en el que viajaba.
“Tenemos hijos capaces de honrar la memoria de sus padres, madres llenas de perdón y deseo de reconciliación, un Ejército consolidado en sus valores y principios militares, éticos y morales, somos una familia que no se destruye ni con la muerte”, puntualizó Erika Bañol Trejos, viuda del coronel Juan Ricardo.
Flores
En el homenaje, los soldados tuvieron una ofrenda floral, hubo eucaristía y un acto simbólico para honrar a las víctimas.
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