LA PATRIA | MANIZALES
La tauromaquia se enlutó cuando aún el fragor de la Feria de Manizales espera lo mejor de la temporada. El diestro de la tierra, Andrés de Los Ríos Cardona, de 35 años, puso fin a su existencia.
El mismo que hizo reventar las palmas de las manos cuando tomó la alternativa hace 12 años, provocó ayer un silencio fúnebre en la Monumental Plaza de Toros de Manizales. El cielo lloró toda la tarde.
Apenas amanecía cuando se supo el desenlace fatal del torero. Del brillante sol de la mañana se pasó al más pálido día. Quienes lo conocían lo recordaron por sus formas de posar frente a los astados y llevarlos hasta darles muerte.
Fue el torero que simbolizó el renacimiento de la afición en Manizales. Desde su alternativa, en la tarde del 5 de enero del 2006, ligó al público manizaleño a acompañar a un paisano.
La promesa
Su carrera, desde los inicios como novillero, fue una promesa. Se formó en la Escuela de Tauromaquia de Madrid (España), becado para las temporadas 2000 y 2001.
En el país ibérico hizo su debut con picadores el 20 de octubre del 2001 y el 20 de junio del 2004, aún sin cumplir 22 años, hizo su presentación como novillero, en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid.
Su padrino de alternativa en Manizales fue César Rincón, con el testimonio de Manuel Jesús El Cid, en una plaza llena y con toros de Ernesto Gutiérrez, la ganadería de la tierra.
Una gran tarde en la que cortó dos orejas a su primer toro, que le merecía por anticipado la salida en hombros, y remató a lo grande con otras otras dos al sexto del encierro. En su recorrido profesional actuó en México y en otras plazas colombianas.
Años después entró en un bache de su carrera, como suele pasar en el mundo del toreo. Aunque no pudo volver a torear con la misma frecuencia, mantuvo sus entrenamientos puntuales en la plaza, siempre esperando el chance para vestirse de luces.
Lo hizo por última vez en su ciudad, Manizales, en octubre pasado, cuando no tuvo suerte con el toro y salió en medio del silencio. En Cali fue su última actuación, en la feria de Toros para Todos de noviembre pasado.
Conmovidos
Luis Bernardo Gómez Upegui
Presidente de la Plaza de Toros de Manizales
Lo recuerdo como novillero, mostró grandes condiciones. Tomó la alternativa en una corrida muy importante, donde triunfó. Fue muy entregado a su profesión. Lamento mucho su muerte porque era de una correcta forma de ser, respetuoso y de buenas maneras en el arte de torear.
William Ruiz Sanz
Directivo de Cormanizales
Estoy consternado con esta noticia. Es lamentable la pérdida de este muchacho. Era extraordinario.
Juan Carlos Gómez Muñoz
Gerente de Cormanizales
Muy triste que un torero manizaleño haya partido de esa manera, Hizo un esfuerzo permanente por estar vigente en el mundo de los toros. Estuve en su última tarde en Manizales en octubre.
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