El oriente está en riesgo: líderes

LA PATRIA | MANIZALES

Después de la alerta temprana emitida por la Defensoría del Pueblo sobre el retorno del conflicto armado al oriente caldense, diferentes organizaciones se reunieron ayer para manifestar su preocupación ante la situación.

La razón del encuentro, realizado en la U. de Caldas, sede Palogrande, fue apoyar el comunicado de la Defensoría y alertar sobre los índices de violencia que aumentan en esta zona del departamento, como lo contó LA PATRIA el lunes.

Además fue la oportunidad para rechazar las declaraciones del secretario de Gobierno de Caldas, Carlos Alberto Piedrahíta, quien insistió en que en el departamento ya no hay violencia de ese tipo.

Para los líderes, hay tres razones para preocuparse: El control de la minería por fuerzas armadas ilegales, el manejo de las economías ilegales por estos grupos y el papel de Caldas en los grandes proyectos minero energéticos que actualmente hay en el país. El informe de la Defensoría alertó sobre esas situaciones en cinco municipios: Samaná, Pensilvania, La Dorada, Norcasia y Marquetalia.

Aseguraron ayer que según el Registro Único de Víctimas, desde la firma del Acuerdo de Paz se han registrado 400 víctimas más en el departamento.

Gobierno

Carlos Alberto Piedrahíta, secretario de Gobierno de Caldas, manifestó a este medio en el informe publicado el lunes que no hay cultivos ilícitos, ni presencia o rearme de grupos armados. También negó la existencia de la minería legal y las amenazas a los líderes.

La crítica a las declaraciones de Piedrahíta van enfocadas hacia lo que se vivía hace 20 años. "Antes de iniciar este siglo, el lenguaje de los dirigentes era el mismo: Caldas es un paraíso, en Caldas no sucede nada. Sin embargo, este departamento fue el que más víctimas tuvo en el conflicto armado del Eje Cafetero", aseguraron los líderes.

Lo que hoy sucede tiene pruebas físicas, aseguró María Rocío Cifuentes, un vocero de la jornada de ayer: "En el informe no hay indicios, hay casos documentados que tienen nombres propios, fechas, lugares. No son refutables". Ante eso, criticó que la solución de las autoridades se basa únicamente en el aumento del pie de fuerza. "Actitudes como esas son las mismas que hace dos décadas veíamos trabajando en los mismos temas", recalcó.