Sebastián Jiménez Vásquez, de 21 años recibió dos disparos cuando visitaba una tumba en el Cementerio San Esteban. Los hechos ocurrieron el domingo en la tarde, como lo informó ayer LA PATRIA.
Jiménez Vásquez, llegó acompañado de varios amigos. Unos dicen que estaba allí para visitar la tumba de su abuelo, otros aseguran que la de su tía (Rosa Elvira Jiménez, asesinada el viernes 1 de enero en la carrera 23 afuera de un parqueadero).
Sin embargo, el sitio donde le dispararon fue frente a la sepultura de Jhon Harvy Leal Cardona, de quien dicen era amigo suyo.
Una persona que esa tarde estaba en el cementerio contó que el muchacho y sus amigos se la pasaron hablando y cantando, mientras que los demás visitantes oraban. En esas estaban cuando le dispararon dos veces.
"El cementerio no estaba muy lleno a esa hora (2:50 de la tarde), cuando se escuchó la detonación. Cuando vimos que era un asesinato, mejor nos hicimos los bobos. Solo vi que un hombre subió hasta la puerta principal y huyó", comentó un señor que todos los días visita el lugar.
Sebastián quedó agonizando y sus amigos, como pudieron, lo sacaron del lugar y en un taxi lo llevaron al Hospital de Caldas, a unas cuantas cuadras de San Esteban. Jiménez Vásquez recibió dos impactos de bala: uno en la cabeza y otro en el pecho. Murió cuando era atendido por los médicos.
Las autoridades iniciaron la investigación con el fin de tratar de llegar a los responsables del homicidio y establecer los motivos del crimen. La familia del joven no quiso dar declaraciones.
El sicario que le disparó a Sebastián al parecer huyó en una moto que lo esperaba afuera del Cementerio.
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