A Valentina Galvis Soto, de 15 años, y a Gustavo Adolfo Parra, de 23, los asesinaron a balazos el miércoles a las 7:00 de la noche. El hecho ocurrió en el barrio La Esperanza de Chinchiná. También resultó herida una niña de 12 años.
La familia de Valentina, joven conocida como la Guicho, cuenta que a ella la atacaron cuando estaba con sus amigos en una esquina. Aclararon que la adolescente no vivía en ese sector.
"Ella vivía en San Fernando, pero era muy querida allá. Tenía a todos sus amigos de infancia y se la pasaba con ellos", dijo la madre entre lágrimas.
Valentina estaba abrazada a su novio, cuando unos hombres llegaron y dispararon contra Gustavo Adolfo, que estaba con el grupo de personas. En medio del susto, la adolescente salió corriendo, pero no llegó muy lejos. Una bala le entró por un ojo y le salió por la parte de atrás de la cabeza.
La jovencita quedó tendida en el suelo. Su novio no paraba de abrazarla. "Ella movía las manos, como diciendo que la ayudaran", narró la mamá. A pocos metros yacía agonizante Parra Arcila.
Un primo de Gustavo Adolfo contó que su familiar estaba en la casa de su mamá y salió a fumarse un cigarrillo cuando le dispararon en repetidas ocasiones. "Él estaba en compañía de las mujeres y el otro hombre, cuando los atacaron".
Una ambulancia los trasladó al hospital local. Parra Arcila murió a las 7:10 p.m., mientras que Galvis Soto, debido a la gravedad de la herida, fue trasladada al Hospital Infantil de Manizales.
"Cuando nosotros llegamos al hospital, ya la habían remitido. A ella la entubaron, porque estaba muy mal y murió a las 11:30 p.m.", dijo un familiar.
Valentina no estaba estudiando y de vez en cuando trabajaba para ayudarle a la mamá. "El sueño que siempre tuvo fue sacarme adelante para que yo no me matara tanto. Ella era alegre, recochera y muy amigable. La gente la quería mucho", dijo su mamá, mientras miraba al cielo y lloraba.
De Gustavo Adolfo se conoció que lo llamaban el Pelón y que vivía en Palestina, pero constantemente viajaba a Chinchiná a visitar a su mamá. A él lo describieron sus parientes como una persona alegre y que trabajaba en construcción.
Las honras fúnebres de Valentina se llevan a cabo en la funeraria La Aurora de Chinchiná. El entierro es hoy, a las 4:00 p.m.
Las autoridades investigan los móviles y los agresores del hecho. Sin embargo, la primera versión que se tiene es que fue por ajuste de cuentas.
Por otro lado, la mamá de Valentina comentó que desde hace 15 días su hija estaba recibiendo amenazas. "Le decían que iban a acabar con la familia y con ella, pero la verdad no sabemos qué pasó".
La menor de 12 años recibió un impacto en una pierna. Se recupera en el hospital de Chinchiná.
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