
LA PATRIA | MANIZALES
Denunciaron que son amenazados permanentemente y aunque pidieron ayuda del Gobierno Nacional para que proteja a su comunidad, los indígenas caldenses no sienten el respaldo.
Al parecer, eso quedó demostrado con el asesinato de Fernando Salazar, presidente de la Asociación de Mineros La Unión y vocal de la Asociación de Mineros del resguardo Cañamomo - Lomaprieta, el martes en la noche.
El líder indígena, de 50 años, y perteneciente a la comunidad Embera Chamí, murió a causa de las heridas que recibió con arma de fuego durante el ataque sicarial perpetrado por dos personas, que lo balearon antes de que entrara a su casa.
El crimen ocurrió en el sector del Avión, en la vereda Tumba Barreto, en la vía entre Riosucio y Supía. Luego de atacarlo, y de acuerdo con lo que dijeron los testigos, los asesinos huyeron a pie por una zona boscosa hacia el Cerro de Morón. Añadieron que en la tarde vieron a varios sujetos merodeando cerca a la casa de Salazar, pero no se imaginaron lo que sucedería más adelante.
Amenazado
Según personas cercanas a la víctima, él recibió amenazas a causa de la labor que desempeñaba con la comunidad minera del resguardo indígena y por eso habían pedido protección de la Unidad Nacional de Protección (UNP), que nunca llegó.
Frente a estos hechos, el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos en Caldas denunció que la comunidad y los mineros tradicionales están en situación de riesgo, el Estado no les presta atención y el Ministerio del Interior no ha puesto en marcha las medidas cautelares que se ordenaron desde el 2009.
El Coronel Luis Duarte, comandante de la Policía Caldas sostuvo que habrá prioridad sobre este caso y por eso se envió un grupo especial de la Sijín a Riosucio para que investigue el hecho y se pueda esclarecer el crimen. Aclaró que por el momento solamente se tiene conocimiento de un atacante.
LA PATRIA intentó comunicarse con los representante en asuntos étnicos de la UNP, pero no contestaron las llamadas.
Persecución a comunidades indígenas
Desde el 2000, el Consejo Regional Indígena de Caldas ha reportado 490 asesinatos de indígenas, especialmente en jurisdicción de Riosucio, Supía y Marmato. Se calcula que alrededor de 100 tienen algún tipo de amenaza actualmente.
Caso representativo es el de Gabriel Ángel Cartagena, quien era el candidato más opcionado para ganar la alcaldía de Riosucio en el 2004, pero un año antes lo asesinaron junto a otros tres indígenas en el sector de La Herradura, cuando lo emboscó un grupo de paramilitares.
Por su crimen condenaron a cuatro paramilitares, a un sargento del Ejército y a otro excandidato que representaba al Partido de la U. Sin embargo, las investigaciones siguen, pues se presume que líderes políticos de la región y comerciantes tuvieron relación con la masacre.
Sepelio
Las honras fúnebres de Fernando Salazar se llevarán a cabo hoy a las 2:00 de la tarde en donde además de 500 mineros, los líderes indígenas esperan el acompañamiento masivo de la población.
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