
LA PATRIA | Manizales
El cuerpo de Gloria Norbela Sánchez, de 43 años, lo encontraron el pasado lunes en un antiguo basurero a pocos metros del sector de Jaleas, a un lado de una obra vial que linda con un cafetal. Presentaba un corte en el cuello y tortura en las manos.
La zona queda a un kilómetro de Pácora en la vía que comunica con Aguadas y según las autoridades, los hechos ocurrieron a las 3:30 de la tarde del pasado lunes.
Algunos testigos de la inspección del cadáver manifestaron que debido a que en el lugar no había sangre, al parecer a la víctima no la mataron en ese sitio, si no que allí los agresores arrojaron el cuerpo.
Era madre de cinco hijos y desde hacía tres meses se dedicaba al aseo y el arreglo de cadáveres para su respectivo velatorio en la funeraria el Arcángel, lugar donde se llevó a cabo su velación.
Arreglaba muertos
Cristian Camilo Sánchez, hijo de la víctima, se enteró de la muerte de su madre por una amiga de ella, quien le dijo que tomara la noticia con calma. Le contó que al lado de su cuerpo había un machete, con el que posiblemente degollaron a la mujer.
Sánchez afirmó que su madre nunca estudió para arreglar muertos, pero que como necesitaba la plata para sacar adelante a los hijos, se le media a todo porque no le tenía miedo a nada.
La describió como una persona alegre y colaboradora. Vivía con una nieta y su hijo menor de 13 años. "La última vez que hable con ella fue hace ocho días y me contaron que a ella la vieron hablando con una mujer en el parque", dijo.
Las autoridades adelantan investigaciones en busca de dar con los agresores.
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El dato
Los familiares de Gloria Norbela realizaron las exequias en la iglesia San José a las 4:00 de la tarde de ayer.
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Otros casos
Manzanares
Mayo de 2009
A Mario Ángel Gómez Montoya y José Otoniel Montoya Ángulo los encontraron degollados y con una puñalada en el pecho, tirados en una cañada del corregimiento de Planes, finca Berlín de Manzanares. Los hombres de 47 y 45 años se dedicaban a la agricultura.
Riosucio
Octubre de 2009
A María Seneida Betancourt Guerra, de 49 años, y a Ancízar Marín, de 54, los encontraron degollados en un matorral a orillas de la quebrada Sipirra en Riosucio. Frente a este caso las autoridades del municipio informaron que los cuerpos de las víctimas presentaban cada uno una herida abierta en el cuello, que según las primeras investigaciones, fueron producidas con un bisturí.
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