De ocho puñaladas, cinco fueron mortales

En la cárcel debe continuar Luis Gonzaga Arias García, de 47 años, capturado hace cerca de tres años en flagrancia, luego de darle muerte a puñaladas a Libardo de Jesús Ospina Arteaga, de 64 años.

La Sala Penal del Tribunal Superior de Manizales confirmó en segunda instancia esta semana la condena que impuso un juez penal de La Dorada por homicidio simple.

El hecho por el que investigaron y procesaron a Arias García ocurrió el 16 de febrero del 2014 en la vereda Macías, sector California, de Samaná. Se trató de un hecho de intolerancia.

El ataque ocurrió en establecimiento nocturno. De acuerdo con testigos, en la madrugada de ese domingo el atacante entró al local, pero la agresión, al parecer, ocurrió afuera.

El dictamen de Medicina Legal indicó que la víctima recibió ocho puñaladas, de las cuales cinco eran mortales. El asesino se ensañó y todos los lances se los hizo al tórax. Los mismos testigos señalaron al victimario, quien intentó huir, pero dos patrulleros de la policía lo persiguieron y lo capturaron.

La apelación del abogado de Arias García se basó en que el condenado actuó en legítima defensa. Trató de probar su teoría basado en una herida que le atendieron al procesado luego de los hechos.

Sin embargo, el médico que declaró inicialmente diciendo que curó una herida producida con arma cortante, durante el juicio oral aclaró que él no dio un dictamen legal, además se indicó que esa lesión tenía rastros de tierra,or lo que pudo ser causada en una caída al tratar de huir, ya que se encontraba alicorado.

Por último, un servidor del CTI que participó en la diligencia de inspección del cadáver, señaló que en la escena del crimen no encontraron un arma blanca junto al occiso. Así se desmoronó la teoría de la defensa. Los términos para manifestar que presentará el recurso extraordinario de casación vencen el próximo lunes.