LA PATRIA | MANIZALES
Para los familiares de los 11 mineros fallecidos en la vereda El Bosque, de Neira, terminó el domingo una pesadilla de 23 días, tras la recuperación de todos los cuerpos. Pero arrancó otra que podría durar hasta dos meses: la identificación.
Como se recordará, hace unos días les tomaron pruebas de ADN a los familiares de los desaparecidos para adelantar trabajo cuando hallaran los cadáveres. Los 11 fueron llevados entre domingo y ayer a Medicina Legal, que se encargará de las necropsias y posteriormente de determinar a qué persona corresponde cada uno.
Ese proceso puede tardar de 30 a 60 días, dependiendo de las condiciones de los cadáveres que, según se conoció, arribaron en muy malas condiciones, algunos hasta desmembrados. Cuando un cuerpo permanece por más de tres días bajo el agua se descompone más rápidamente.
En este tipo de casos se extrae una costilla, la cuarta del lado derecho, para determinar la edad; y un rodete del fémur de los cuerpos. A los familiares se les saca una muestra de sangre. Todas se envían a Cali y allá realizan el análisis y el cotejo. Una vez que salen los resultados se determina el parentesco por un 99,9% de relación en las muestras.
Otra forma de identificación es por medio de la carta dental. Es decir, un examen con la descripción de cada pieza dental para compararla con las historias clínicas que estas personas tuvieron en vida. Medicina Legal Caldas trabajó con cinco cuerpos el domingo y ayer se dedicaba a los otros 6.
La Gobernación de Risaralda, por medio de la funeraria Renacer, se encargará del costo de los cofres fúnebres.
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