Condenan a sacerdote por colaborar con la guerrilla

Q'HUBO | LA PATRIA | MANIZALES

Cerca de dos años después de comenzar el proceso en contra del sacerdote Pedro Pablo Reinoso, alias Pedro Plata, el Juez Especializado de Manizales lo condenó a 14 años de prisión por los delitos de desplazamiento forzado agravado en concurso con rebelión. Los hechos ocurrieron en Florencia (Samaná).

En el momento de su captura, que fue realizada por el grupo Armados Ilegales de la Sijín de la Policía en noviembre de 2011, el sacerdote ejercía en la parroquia de Maltería en Manizales y en el colegio de este sector.

Los abogados defensores, Orlando Cuadros y Walter Moncada, apelaron de la decisión y presentarán su escrito los próximos cinco días. Mientras tanto el cura sustentó verbalmente durante la audiencia su apelación.

Desde 2011

La Fiscalía presentó desde diciembre de 2011 varios testigos que señalaban al religioso como colaborador del Frente 47 de las Farc. Un profesor de Florencia denunció al sacerdote porque, según él, en marzo del 2007 el cura le pidió ayuda a comandantes en esta zona para sacar al profesor y que la orden era desaparecerlo.

La Fiscalía presentó interceptaciones telefónicas realizadas por el CTI (para judicializar a miembros de las Farc en otras investigaciones) en las que amenazan al denunciante si no se iba de la zona.

Según las investigaciones, Pedro Plata era el encargado de adoctrinar a los subversivos con teorías marxistas y leninistas.

También lo señalaron de suministrar e ingresar a la zona armamento, munición, elementos logísticos y de intendencia como radios, insumos médicos y víveres para los subversivos. De hacer misiones médicas para que atendieran a los guerrilleros heridos en combate, para lo que ponía a disposición la casa cural del corregimiento de Florencia. Allí también se ocultarían del Ejército.

Añaden que utilizaba las misas en las veredas como pretexto para reunirse con los jefes de la guerrilla.

EL DATO

La defensa del sacerdote solicitó durante el juicio a Rubén Darío Ortiz Giraldo, alias Moncholo; y a Elda Neyi Mosquera García, alias Karina; dos exguerrilleros de Justicia y Paz, quienes aseguraron que no conocían al sacerdote y nunca escucharon de que les colaborara.

La defensa también aseguró que los comandantes guerrilleros tenían amenazado al cura, lo que él denunció en su momento y reconoció que el padre sí tuvo problemas con el denunciante, pero dijo que fue el profesor el que amenazó al sacerdote con meterlo en la cárcel.