Carlos Ramírez, el ingeniero de su familia

LA PATRIA | MANIZALES

Aunque murió a sus 72 años, Carlos Enrique Ramírez Botero era un hombre saludable y enérgico, a quien consideraban sus allegados como el eje de su círculo familiar. Por eso, su muerte, que ocurrió en un accidente de tránsito el pasado sábado en la noche los tomó por sorpresa.

Ese día, el ingeniero regresaba a su casa en el barrio La Francia, en un automóvil Mazda Miata descapotable cuando perdió el control del vehículo a cuadra y media de su destino, dio contra el borde de un andén, luego chocó contra dos árboles y falleció instantáneamente.

Sus familiares creen que un infarto fulminante pudo haber provocado el accidente, pues no le gustaba andar rápido en el carro, y la paciencia a la hora de conducir era su principal virtud, recuerdan.

Su aporte

Carlos Enrique era egresado del programa de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional sede Manizales, y no tardó mucho para pasar a ser docente, pues en 1974 asumió el nuevo rol y durante 20 años instruyó a los alumnos que pasaron por sus aulas, destacándose por ser un profesor muy severo, explica Mario Ramírez, su hermano, y quien también es ingeniero.

Además hizo parte del grupo fundador del canal Telecafé en donde participó como asesor técnico y cuya primera gerente fue Elvira Escobar de Restrepo. Así mismo, hizo parte de las liquidadas Empresas Públicas de la capital de Caldas, en donde se jubiló en 1995.

El padre de todos

Desde su jubilación, Carlos, el mayor de siete hermanos, se dedicó a disfrutar de su familia, a trabajar en una finca cafetera de su propiedad y a viajar. Según Mario, él era un hombre tranquilo, inteligente, analítico y dedicado a sus cosas.

"Además era un hombre muy correcto, siempre tuvo reconocimiento de respeto por todas las cosas que hizo", puntualizó su hermano.

Aunque era soltero, para ellos era el padre y su consejero, además de ser considerado como un verdadero amigo y prácticamente el abuelo de nueve sobrinos. Siempre era quien amenizaba las reuniones familiares.

Cayó en un colector de aguas

A un hombre sin identificar, y quien al parecer es habitante de la calle y de aproximadamente 45 años, lo encontraron muerto en la tarde del sábado dentro de un ducto de alcantarillado en la Plaza Alfonso López, de Manizales.

El lugar en donde cayó no tenía tapa de protección y es un sumidero en donde se acumula el agua lluvia del parque, por lo que se supone que murió ahogado, pues estaba durmiendo cerca al sitio. Para su rescate fue necesaria la presencia de los Bomberos.

Un joven que estaba con él explicó que ese día en la mañana lo vio convulsionando, lo ayudo a levantarse y luego de que se recuperó, se fue. Dos horas después, alrededor de las 2:30 de la tarde, supo que habían encontrado a una persona muerta y verificó que se trataba de su amigo, pero negó conocer su identidad.

Respuesta de Aguas de Manizales

En un comunicado que expidió el mismo sábado Aguas de Manizales se especificó que la entidad no había recibido ninguna denuncia por el robo de tapas en este sector, y que investigará lo que pasó.