
LA PATRIA | MANIZALES
A las 3.00 de la mañana de ayer Andrés Felipe Jiménez González, de 12 años, se levantó cuando sintió que su papá salía a trabajar el campo. Le pidió que lo llevara, pero el padre no accedió y le pidió que durmiera.
El adolescente se devolvió para la cama y se acostó al lado de su hermana, Valeria, de seis años. Tres horas después ocurrió lo peor. La tía de los niños llamó al campesino para informarle que Andrés Felipe no despertaba y que la niña botaba algo por la boca. Se comunicaron con los organismos de socorro y al sitio llegaron Bomberos y GER. Fue en una finca de Maltería y el desvío para ingresar a ella queda frente a la estación de servicio de Potro Rojo, vía al Magdalena.
Cuando los socorristas iban hacia allá y habían recorrido 30 metros se encontraron a la familia de los menores, con ellos en brazos. Andrés Felipe estaba muy delicado, lo condujeron a San Marcel, pero llegó sin signos vitales. GER transportó a Valeria a Assbasalud, pero luego debieron remitirla a la misma clínica del hermano, pues se agravó. Tenía dolor de garganta y taquicardia, por lo que le suministraron oxígeno con máscara facial.
La principal hipótesis del caso es una intoxicación generada el humo de la máquina para ordeñar, que funciona a gasolina y se habría quedado prendida. Los niños dormían en el segundo piso y todo esa sustancia les llegó a la habitación con ese desenlace fatal de la muerte del niño.
Gustavo Martínez Cardona falleció luego de los golpes sufridos tras una caída. Era del hogar de paso Mi Jesús, de Manizales.
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