Partamos de una base. La presencia de insectos en un hogar es inevitable. Los bichos hacen parte de la rutina doméstica y mantenerlos a raya es, simplemente, cuestión de aseo.
Cucarachas, moscas, arañas, piojos, zancudos, garrapatas, lagartijas, hormigas, ácaros hacen parte del grupo de los artrópodos. La fauna de esta especie en la mayoría de las casas colombianas incluye, principalmente a las cucarachas, las moscas, los zancudos y, donde hay mascotas, las pulgas y garrapatas.
Jorge Mario Cadavid, bacteriólogo y entomólogo, profesor en la facultad de medicina de la Universidad de Antioquia, explica que en el planeta hay un millón 200 mil especies descubiertas de artrópodos. "De este grupo, solo el 2 o 3 por ciento nos afecta negativamente en el aspecto médico o económico".
Según este investigador, los artrópodos pueden ser agentes directos de enfermedades que causan por envenenamiento o parasitismo. "El otro grupo es el de los transmisores de patógenos, es decir, los vectores biológicos, que son muy importantes en salud pública porque producen enfermedades como la malaria, el dengue, la leishmaniasis".
Existen también los vectores mecánicos, que contaminan su cuerpo con microorganismos y cuando pasan por el ambiente humano estos agentes contaminantes entran en contacto con los utensilios o bienes humanos. Allí es cuando empiezan los problemas domésticos en millones de hogares.
Los bichos de las casas se llaman artrópodos sinantrópicos, caracterizados por vivir en el hábitat humano. "En zonas cálidas el enemigo público número uno es el vector que transmite el dengue, que es el mosquito de aedes aegipti", dice Cadavid. Este experto apunta que el control de este mosquito está en manos de todos pues depende, exclusivamente, de controlar los depósitos de agua.
Pero en el otro lado están las hormigas, las moscas y las cucarachas, siendo las dos últimas las más peligrosas. "Son los dos vectores más importantes. En sus patas y su cuerpo pueden estar contaminados hasta con 200 especies de microorganismos patógenos. Entre ellos bacterias, hongos, parásitos y virus. Dentro de las bacterias podemos encontrar aquellas comprometidas en los cuadros de diarrea, que son las enterobacterias".
Cadavid agrega que se han realizado estudios que muestran que las cucarachas y moscas pueden transmitir la Entamoeba histolytic, la ameba más agresiva que ataca el sistema digestivo humano.
"Una amibiasis puede producir diarrea intensa en un niño y si no se actúa rápidamente se generan complicaciones graves", dijo.
El médico infectólogo Santiago Estrada, director del laboratorio de la Congregación Mariana, advierte que a pesar de que no existe evidencia científica precisa sobre el tema, es un hecho que las cucarachas son portadoras de bacterias que atacan el organismo de los humanos. "Son animales altamente contaminados, están en contacto con toda clase de mugre y sustancias en descomposición".
Jorge Cadavid explica que una mezcla entre dos cosas puede, por lo menos, mantener estos bichos alejados. "Fumigación y limpieza".
* No basta con eliminar los desechos de comida en los platos. Las cucarachas, según este experto, buscan fuentes de agua. "Eso fue lo que hizo que estos animales se domiciliaran, porque pueden alimentarse de tela, de papel o de cualquier cosa, pero no pueden sobrevivir sin agua".
* Luego de fumigar se deben eliminar los huevos que queda como residuos. Hay que evitar los depósitos de agua. "Debajo del escurridor de platos es un paraíso para las cucarachas. El trapo húmedo en la cocina también". Así que una clave es mantener la cocina seca.
* Tenga cuidado con el manejo de basuras de la casa, pero ojo, no solo hay que cuidar los desechos de su hogar, sino los del vecindario. Las moscas entran a su casa por una ventana abierta y con ella llega las bacterias que trae del basurero en la esquina y la materia fecal que encontró una cuadra más arriba.
* Mantenga los alimentos y utensilios de la cocina debidamente cubiertos. "Sobre todo cuando hay niños, pues ellos son mucho más vulnerables".
* Las hormigas, aunque parezcan inofensivas, causan grandes pérdidas económicas en un hogar pues contaminan los alimentos.
Para Sergio Eduardo Linares Villalba, médico veterinario y docente de la Universidad de Caldas, cuando en el hogar hay mascotas lo primero que debe hacer el propietario es seguir las recomendaciones del veterinario.
"En el caso de los ectoparásitos: pulgas, piojos, ácaros debe aplicar algunos medicamentos específicos para mascotas y utilizar de manera adecuada cierto tipo de venenos para controlar el medio ambiente donde vive la mascota. Este control es de manera integral, porque no saca nada con aplicarle el medicamento si no asea la casa".
Por otra parte con los endoparásitos también es el veterinario quien recetará los vermífugos para los tipos de parásitos internos que tenga la mascota.
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