Blanca Eugenia Giraldo
LA PATRIA | Manizales
Es un dolor molesto en distintas partes del cuerpo y aunque se desconoce por qué se presenta, hay ciertas hipótesis que se plantean, por ejemplo las neurológicas, endocrinológicas y psicológicas, pero que no se han logrado comprobar. Lo que sí se sabe hasta ahora es por qué se mantiene en el tiempo, ya que es un dolor permanente que no mejora.
Según el neurólogo Jhon Jairo Hernández, se presenta una hiperpolarización en la segunda neurona del dolor, ubicada en la médula espinal, lo que quiere decir que la neurona se activa y envía influjos permanentes hacia el cerebro, lo que mantiene el dolor.
Para llegar a un dictamen Hernández explica que hay unos criterios establecidos por la Sociedad Americana de Reumatología, que se renovaron en el 2010, en los que se busca: que sea dolor generalizado, que tenga trastornos del sueño, que haya trastornos depresivos habitualmente y un número alto de pacientes, más o menos un 60% se acompañan de hipotiroidismo, osea que hay una alteración del funcionamiento de la glándula tiroides.
Aparte de estos criterios deben descartar otro tipo de enfermedades reumatológicas como la artritis que pueden ocasionar dolores articulares. "No existe ninguna prueba que nos diga que es una fibromialgia, de ahí que el diagnóstico es puramente clínico".
Aunque afecta también a los hombres, de cada 10 diagnósticos 9 son mujeres. Para Hernández la mayoría de las afectadas son posmenopáusicas. "Como no sabemos la causa, sí hay una serie de factores endocrinos que pueden estar presentes, hay también factores culturales y sociales que pueden favorecer el proceso".
¿Qué la produce?
De acuerdo con los casos que se han documentado, se han establecido como causantes de la enfermedad infecciones bacterianas o virales, problemas emocionales, en el trabajo o personales. En otros casos, el síndrome se presenta después de que otra enfermedad deteriore la calidad de vida del paciente, como el lupus, la artritis reumatoide, entre otros.
El estrés, la depresión y la ansiedad representan un papel importante en esta enfermedad, pues reducen las sustancias importantes en el sistema nervioso que regulan el dolor, intensificando los síntomas que padecen los pacientes.
Habitualmente es un dolor muscular constante, se exacerba con el cambio de genio, con el frío. Puede haber zonas de mayor dolor, por ejemplo hay personas que sufren de mucho dolor de cabeza, pero a su vez tienen otros dolores.
También causa fatiga continua y sensibilidad anormal en las articulaciones, tendones y otros tejidos blandos, afectado principalmente el cuello, los hombros, las caderas, los brazos y las piernas.
Si se deprime o hay mayor ansiedad los umbrales bajan y el dolor se hace más manifiesto. Por eso el apoyo de la familia y en el campo laboral es más fácil controlarla.
De igual manera, la fibromialgia puede causar fatiga continua, trastornos del sueño, sensibilidad a la luz y el sonido, y generar algunos problemas cognitivos.
• Dolor profundo y diseminado, y puede presentarse en todas las partes del cuerpo. Comúnmente empeora en horas de la mañana. Se describe como una molestia punzante, palpitante y con espasmos. El entumecimiento, hormigueo y ardor con frecuencia también son comunes.
• Fatiga o cansancio constante. Interfiere en actividades cotidianas, laborales, personales, sociales y educativas. Los pacientes con este síndrome sienten un extenso y profundo agotamiento y poco vigor al realizar funciones normales.
• Trastornos del sueño, por eso los afectados carecen de jornadas de descanso plenas y reparadoras, pues el sueño se interrumpe por estallidos de actividad cerebral que lo despiertan, reduciendo la cantidad de tiempo de sueño profundo.
- Colon irritable
- Dolores de cabeza
- Migrañas
- Problemas de memoria y concentración
- Sensibilidad de la piel
- Resequedad en los ojos y la boca
- Ansiedad
- Depresión
- Zumbido en los oídos
- Mareo
- Problemas de visión
- Síntomas neurológicos
- Problemas de coordinación
A pesar de que la fibromialgia es una patología de difícil diagnóstico y tratamiento, existen varias alternativas farmacológicas y no farmacológicas que mejoran la calidad de vida de los pacientes de esta enfermedad. Es importante que las personas que padecen este síndrome consulten a su médico, quien puede ofrecer diferentes alternativas para tratar el dolor y otros síntomas asociados a la enfermedad.
Las personas que se diagnostican con fibromialgia, en muchas ocasiones, se ven afectadas en el campo laboral, emocional y psicológico. Por lo cual es muy importante que sigan el tratamiento prescrito por el especialista.
* Dormir 8 horas diarias
* Hacer ejercicio periódico
* Alimentarse de manera balanceada.
* Si son hipotiroideos hay que controlar la parte metabólica para que este ayude en su control.
* Es indispensable el ejercicio, sobre todo el aeróbico, ojalá en la piscina: Se ha demostrado que nadar es el ejercicio más adecuado para esta afectación, ya que el cuerpo pesa menos y hay menos impacto. Al nadar todos los músculos del cuerpo se estiran y además se fortalece el músculo sacro del corazón y se favorece la parte respiratoria. El reumatólogo Hernández advierte que cuando el paciente comienza con esta terapia hay mucho dolor y tan solo en la octava o novena sesión comenzará a ver los buenos resultados.
* Otras terapias que ayudan son el yoga y el reiky.
* También sirve la autoayuda y la relajación bajo hipnosis.
Aunque puede aparecer a cualquier edad, la posmenopausia es una etapa donde es más frecuente. No obstante, hay niñas de 12 años que ya la padecen.
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