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Blanca Eugenia Giraldo
LA PATRIA | MANIZALES
Al preguntar por Ulíses Galeano González en la Unidad renal del Hospital de Caldas SES, se podría decir que todos sus compañeros lo conocen. Hasta William, un pequeño de 13 años que también asiste a este centro asistencial, lo identifica por su bigote.
Galeano González, de 43 años, recibió un trasplante de riñón hace cerca de cinco años. "Comencé a vivir de nuevo el 20 de diciembre del 2008, día en que recibí el trasplante". Esa felicidad, según él, le duró poco, desde el año pasado en sus citas de control médico ya se sentía enfermo y hasta estuvo hospitalizado casi dos meses.
"Resulta que Caprecom me incumplía con el suministro de inmunosupresores, medicamento vital para que el trasplante funcione bien. El problema se agravó y desde febrero de este año debo asistir a diálisis, tres veces a la semana, el riñón trasplantado se me dañó".
Según el nefrólogo Carlos Buitrago la falta de medicamentos llevan al rechazo del trasplante (ver entrevista). LA PATRIA consultó con la directora de Caprecom en Manizales, Olga Giraldo, y expresó que como desconoce el caso iba a consultar y luego se comunicaría con el usuario o con sus familiares. Agregó que le extrañaba la queja porque en la entidad se lleva un control muy estricto con el suministro de medicamentos para este tipo de pacientes.
En la tarde se le llamó de nuevo, pero nunca respondió.
El nefrólogo Carlos Buitrago explica que el trasplante de riñón practicado oportunamente representa hasta ahora la mejor opción para los pacientes con enfermedad renal avanzada. "Esto no solo les ofrece la opción de no continuar sometidos a diálisis, sino de reintegrarse con calidad de vida a su entorno familiar, social y laboral".
Buitrago explica en qué consiste la enfermedad que lleva a los pacientes a requerir diálisis o un trasplante de riñón y cuáles son los los problemas que afrontan algunos pacientes después del trasplante por la falta de medicamentos.
- ¿En qué consiste la enfermedad renal crónica?
Cuando desarrolla síntomas y la función de los riñones está por debajo del 10%.
- ¿Hay señales de alarma?
Infortunadamente la enfermedad de los riñones es muy silenciosa y se detecta cuando ya está muy avanzada.
- ¿Influye el factor hereditario para que haya enfermedad renal?
Suele haber asociación familiar, que es diferente a decir que es hereditario. Es más frecuente entre familias en las que hay enfermedad renal.
- ¿Se da más en adultos o en niños?
Es más común en adultos que en niños, aunque se puede decir que se presenta a cualquier edad.
- ¿Ser diabético se asocia con la enfermedad renal?
La causa más frecuente de enfermedad en los riñones que requiera diálisis es la diabetes. Aproximadamente la tercera parte de las personas que están en diálisis son diabéticas.
- ¿Cuál es la expectativa de vida de un paciente que está en diálisis?
En promedio se considera que es de cuatro años.
- ¿Quiénes no son aptos para un trasplante de riñón?
Los que tienen una enfermedad terminal, no necesariamente cáncer; puede ser una falla cardíaca avanzada, cuando tienen una infección incurable o muy avanzada que nos haga pensar que la expectativa de vida es menor que la cantidad de vida con el trasplante. También están las personas que no aceptan bien los medicamentos o que han suspendido sus tratamientos muchas veces. En resumen, se puede decir que 80% de pacientes en diálisis son candidatos potenciales para llegar a ser trasplantados.
- ¿Qué tipos de donantes hay?
El riñón a trasplantar puede provenir de un donante vivo compatible (generalmente un familiar cercano) o cadavérico (mayor número de donaciones en Colombia), previa autorización de la familia.
- ¿Hay rechazo después del trasplante?
Sí, cuando el nivel de compatibilidad no es el más adecuado, el receptor lo rechaza. Pero también sucede cuando la persona suspende el tratamiento, hecho que en Colombia ocurre con mucha frecuencia porque las EPS no suministran a tiempo los medicamentos. En el último año, más de la mitad de los rechazos de los pacientes en mi consulta diaria se deben a la falta de suministro de los medicamentos.
- ¿Este rechazo tiene tratamiento?
Sí, se puede rescatar el riñón, pero no va a ser lo mismo porque le deja secuelas; además, no le va a durar lo mismo. Tengo por lo menos un paciente que ya está en diálisis debido a que su aseguradora no le suministró a tiempo los medicamentos que necesita para evitar un rechazo luego del trasplante. Esa misma EPS se gastó $30 millones en el trasplante, y por no entregar los medicamentos los tira a la basura.
El trasplante de riñón ha logrado mejorar la calidad de vida de los pacientes trasplantados, toda vez que las tasas de supervivencia del paciente y del injerto cada vez son más largas, se estiman en alrededor del 90% al año del trasplante. Sin embargo, cada año hay menos donantes efectivos, menos trasplantes renales y mayor lista de espera para este tipo de trasplante.
De acuerdo con información oficial del Instituto Nacional de Salud de Colombia (INS), Antioquia es el departamento que más cultura de donación tiene, con 55%, seguida por Bogotá con 38% y Valle 20%. Santander, Huila y Atlántico registran menos donantes con 9%, 5% y 1%, respectivamente.
Gloria Magnolia Sepúlveda, enfermera especialista en donación y trasplante de órganos y coordinadora de la Red de Trasplantes en Caldas, afirma que la cifras de rescates de órganos en Manizales también han disminuido, este año ha practicado cuatro y el año pasado seis. Por eso hace un llamado para que las familias de posibles donantes autoricen de manera oportuna la donación de órganos con el fin de salvar a pacientes que se encuentran en lista de espera.
"Algunos piensan que sólo con el carné es suficiente, pero la realidad es otra, al final quien decide si dona o no los órganos es la familia”.
Según las estadísticas oficiales, cada año disminuye el número global de trasplantes renales con el consecuente aumento en la lista de pacientes en espera por un riñón.
En el 2012 se practicaron 767.
En el 2011 se realizaron 798.
En el 2010 la cifra llegó a 868.
El docente pensionado Rodolfo Herrera Arias vive en San Diego (Samaná) y hace cinco recibió un trasplante de riñón. Desde luego que su vida cambió, pues pasó de asistir tres días a la semana a diálisis a tener un nuevo riñón. Solo que ahora su padecimiento se debió a que la EPS a la que está afiliado, Cosmitet, no le suministra un medicamento esencial para evitar que el riñón trasplantado se dañe. "Me dan para un mes y luego nada. No han valido ni acciones de tutela, ni incidentes de desacato, siempre es el mismo cuento, como si no entendieran que un trasplante no se consigue a la vuelta de la esquina", expresa el docente.
Herrera lo único que pide es que le cumplan con el suministro de los medicamentos. "Este fin de mes me toca ir a control médico, aún no me he practicado los exámenes y temo que algo no esté bien. El mes pasado, la que dirige la Asociación de trasplantes de riñón en Manizales me prestó parte del medicamento, debía tomarme dos al día, pero como no alcanzaba, reduje la ingesta a una diaria. Sino es por esta ayuda, estaría muy mal", afirma.
Jorge Aragón, auditor de Cosmitet en Manizales, le respondió a LA PATRIA que desconocía el caso y que debía consultar con el director médico o esperar hasta la próxima semana para conocer una respuesta.
Salió apresurado de la Unidad de diálisis del Hospital de Caldas SES, ya en la cafetería miró a su papá y le dijo: "Un milito y dos pastelitos, lo de siempre, eso es lo que quiero", es William Andrés, un pequeño de 13 años que hace cinco meses debe someterse a diálisis porque sus riñones ya no funcionan bien.
Su padre, con un afán apenas comprensible, le trajo el pedido. "El niño sale de terapia con hambre y deseoso de ingerir algún alimento", expresó.
El papá o la mamá viajan con él desde Anserma (Caldas), tres veces a la semana. William Andrés tuvo los primeras señales de una enfermedad renal cuanto ajustó dos años de edad. Luego mejoró y llevó una vida normal hasta hace seis meses, cuando comenzó a hincharse, primera manifestación de que la enfermedad renal había aparecido de nuevo.
Esta vez no hubo medicamentos que lo aliviaran, el pequeño necesita diálisis mientras puede acceder a un trasplante de riñón, solo que esta última opción no parece llegar con la prontitud que el niño lo requiere.
Mientras el papá cuenta la historia, el pequeño termina su algo, y cuenta las páginas ya resueltas de una revista de sopa de letras que siempre lo acompaña. "En todo este rato hice como seis. Este año no pude estudiar, cursaba octavo grado, espero mejorar pronto porque quiero volver al colegio", dice el niño.
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