B. Eugenia Giraldo
LA PATRIA | MANIZALES
Residuos peligrosos como ácidos, vidrios, agujas y jeringas, entre otros, no deben juntarse con los desechos ordinarios. Esta recomendación la hace la Empresa Metropolitana de Aseo (Emas), luego de que dos operarios se quemaron con ácido durante la recolección de residuos en un sector del barrio La Estrella.
El gerente de Emas, Juan Carlos Quintero, manifestó que las lesiones fueron en las manos, el rostro y el cuello.
Ocurrió el viernes pasado en horas de la noche, después de recolectar las bolsas y al compactar los residuos. Un líquido les cayó a los trabajadores, que en un principio pensaron que era agua. Al poco tiempo empezó la picazón y observaron que tenían quemaduras y heridas.
"En este caso fue un ácido lo que les ocasionó las lesiones y no explicamos cómo estaban almacenados como basura ordinaria", explicó el gerente, quien resaltó que por fortuna hoy los empleados se recuperan.
De acuerdo con Quintero, estos accidentes se dan por la mala disposición de residuos. Aseguró que investigan qué tipo de industria hay en el sector y que interpondrán una denuncia por lo sucedido, porque no solo se afectaron a los operarios, sino que quieren impedir que sucedan casos similares.
El gerente de Emas, invitó a la población de Manizales a crear conciencia para que revisen cómo disponer de residuos que afectan la vida o la salud de otras personas y también al medioambiente. Advirtió que los ácidos no pueden desecharse con la basura ordinaria y que requieren de una disposición especial. Para esto, dijo hay una empresa en la ciudad, Tecnologías Ambientales (Tecniamsa), que se encarga de la recolección de estos residuos peligrosos.
"Así como fueron nuestros operarios, también puede ser otra persona, un habitante de calle o los que hacen el aprovechamiento final. Esto es de cuidado y responsabilidad para saber qué residuos disponemos y cómo lo hacemos".
Otros accidentes que se presentan son con las jeringas, que según Quintero, se arrojan como desechos sin ninguna protección. Lo mismo sucede con las lámparas de mercurio y las bombillas ahorradoras que tienen un gas que puede ocasionar intoxicaciones.
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"El mayor índice de accidentes sucede con agujas y con vidrios. Después de un chuzón con una aguja hay que seguir un protocolo que implica: vacunación y observación", Juan Carlos Quintero, gerente de Emas.
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* Los que no son peligrosos, pero que por su manejo requieren de un cuidado especial como vidrios, cerámicas rotas, chatarra, elementos puntiagudos, es importante que al entregarlo a los operarios de Emas les informen para que ellos realicen el manejo adecuado.
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30 y 31 de mayo se realizará la próxima jornada posconsumo organizada por la ANDI con apoyo de Emas y otras entidades.
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