Luis F. Gómez


La última encuesta de pymes realizada por ANIF revela que Manizales es una de las ciudades más activas en este tipo de empresas, pequeñas y medianas. Por ejemplo, en el indicador de uso de la capacidad instalada ha subido. Los resultados de la capital caldense comparados con los promedios nacionales muestran ciertas particularidades en lo que refiere a las acciones de mejoramiento, que en algunos casos son fortalezas y en otros, debilidades.
La preocupación por formar su capital humano tiene una puntuación similar al nacional, pero presenta un descenso entre 2018 y 2017. Lo que manifiesta una caída en el empeño de acciones de mejoramiento en capacitación de personal. En efecto, pasó de un promedio 57% a 36% por sectores de las empresas encuestadas. La elevación de la productividad de la mano de obra está vinculada estrechamente a la capacitación de la misma. Por ello, inquieta esa disminución.
Con respecto a tener una política o prácticas de responsabilidad social empresarial, las pymes de Manizales son más sensibles al tema, pues tienen un promedio de intención del orden de 17% de las empresas mientras que el mismo indicador nacional es de 8%. Es decir, los empresarios son más sensibles a los asuntos de responsabilidad social.
La vinculación a gremios y con las universidades es muy pobre el desempeño nacional y Manizales no es la excepción. Este es un nuevo llamado para las universidades y en general los centros de pensamiento para construir más puentes con la realidad empresarial.
Un punto, que ha sido una de las preocupaciones más importantes de la Cámara de Comercio, como lo ha señalado su presidente Lina María Ramírez, parece haber tenido eco en los pequeños y medianos empresarios en el área industrial. Frente a la pregunta si tienen pensado lanzar un nuevo producto el promedio de respuesta en Manizales para el sector industrial fue del 18%, mientras que el mismo dato a nivel nacional es de 10%. ¡Es decir, casi el doble! Mientras que para los sectores comercio y servicios tienen resultados muy parecidos a los nacionales.
Finalmente, en lo que respecta a la obtención de certificaciones de calidad, que están ligadas al mejoramiento continuo, la disposición a buscar las certificaciones bajó entre 2017 y el presente año, pasando de un promedio de 29% a 19%, es decir, bajó 10 puntos. Aunque está en el rango nacional.
De otra parte, sobre la afiliación de las pymes a las Cámaras de Comercio, se evidencia que en Manizales todavía hay campo para profundizar la penetración de la Cámara. Mientras que el promedio de afiliación a nivel nacional es del 96%, y en Manizales es menor en las pymes por sector: industrial 56%, comercio 63% y servicio 75%.
Bien vale la pena que los gremios analicen con detenimiento esta encuesta, pues hay allí información que puede guiar la toma de decisiones de política pública e indicar focos de acción para las instituciones de apoyo al empresariado.
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