Fragmento.
Hace 40 años se recibió en Manizales el Informe Epidemiológico Semanal de Morbilidad y Mortalidad, MMWR, junio 5, editado por los Centros para  Control de la Enfermedad de los Estados Unidos de Norteamérica, CDC.
El documento destacaba un artículo titulado Neumonía por Pneumocystis. Era la descripción de una neumonía rara en 5 hombres de Los Ángeles. Posteriormente, el 5 de julio apareció: Sarcoma de Kaposi-SK- y Neumonía por Pneumocystis carinii entre hombres homosexuales en Nueva York y California.
Se relataba que durante los 30 meses anteriores una extraña enfermedad tumoral entre los estadounidenses, SK, había sido diagnosticada en 26 homosexuales, 20 en Nueva York y 6 en California, con un rango de edades de 26-51 años. De ellos  murieron ocho, 7 en NY y 1 en California.
Otra característica especial fueron las diferentes severas infecciones como las producidas por Pneumocystis carinii- ayer parásito hoy hongo, Pneumocystis jiroveci-, que aparecían por el severo compromiso inmunológico, siendo la principal causa de muerte entre los pacientes con SIDA. Infecciones múltiples fueron probadas en varios pacientes.
Nadie sospechaba que esta información epidemiológica daría lugar al desarrollo de una intensa investigación. Paralelamente, comenzaron a aparecer las teorías sobre la causa de lo que se denominó Síndrome de la Inmunodeficiencia Adquirida, SIDA.
Llegó el aislamiento del Virus de la Inmunodeficiencia Humana, VIH, en diferentes centros: El Instituto Pasteur en Francia, 1983, y el norteamericano Instituto Nacional de Cáncer. Los trabajos promovieron un conflicto científico por la primacía en el descubrimiento del virus. Sin embargo, el francés Luc Montagnier junto a Françoise Barré-Sinoussi, recibieron el Premio Nobel, 2008, por su descubrimiento.
Entre esa época y la actual han sucedido miles de eventos, microbiológicos y humanos con sus enfermedades y comportamientos, lo que ha llevado a la adopción de diferentes acciones para la protección y la atención de las sociedades con o sin integrantes con SIDA.
El SIDA ha sido la causa de 32 millones de muertes y 38 millones de personas conviven hoy con el virus.
No fue fácil abordar el problema en Manizales en sus etapas iniciales, cuando ya se conoció la relación entre homosexuales y el virus. Las dificultades no surgieron con el manejo del virus, que poco a poco comenzó a ser investigado con los instrumentos e insumos  existentes y los que se fueron adquiriendo aunados a la consultoría  internacional.
Lo difícil sobrevino con el manejo de las personas que supuestamente tenían el virus, en medio de una sociedad, que incluía dignatarios de toda clase e inclusive docentes universitarios, que comprendían muy poco o casi nada de la vida de los homosexuales y travestis, y menos verlos en las mismas instalaciones que frecuentaban para otras actividades. Inclusive hubo que defender férreamente la privacidad de la historia clínica.
Con el conocimiento de la conexión homosexual-virus, se difundió información verídica, pero también falsa o tendenciosa, cada vez con más intensidad a través de los medios de comunicación, lo que preocupó a la comunidad debido a equivocadas pero tradicionales concepciones sobre la sexualidad y la vida en general de la población.
El lamentablemente desaparecido Centro de Diagnóstico, Referencia e Investigación del Servicio de Salud de Caldas, fue el sitio para múltiples investigaciones y concentración voluntaria de homosexuales y travestis, quienes con sus espontaneidades y risas inundaban el recinto. Maravillosos seres humanos, desde Claro de Luna, Lucerito y otros, nombres ficticios. Se recuerda al serio Rayito de Luna.
Ahora, para fortuna, todo ha variado y el enfoque humano de la enfermedad ha hecho que sea una más de todas las infecciones, a lo que han contribuido las diferentes maneras de transmisión, con una mayor humanización en la manera de atender a los enfermos.