Imaginando al Mandatario / Jarol Mauricio Ríos López, El Horro (Anserma)

La siguiente ponencia participó en la 1er. versión del Foro Juvenil: Imaginando al mandatario ideal, organizado por el Programa Prensa Escuela y apoyado por la Corporación Cívica de Caldas. Este se efectuó el 1 de septiembre del 2015.

Sueño con un mandatario que le dé una mirada al campo desde su plan de desarrollo que incluya en él elementos de la agricultura familiar, que pueda generar políticas públicas, que apoye los mercados rurales, que sea un facilitador de un mercado de tierras aprovechando nuestra biodiversidad, que recupere la relación campo-ciudad y que le dé un nuevo enfoque a nuestra ruralidad.

Un líder que ayude a engrandecer el mundo de los campesinos que están en contacto con la vida; que tenga una propuesta pedagógica clara para los jóvenes, que sea amigable con el ambiente a través de la agricultura por el rescate de las semillas criollas, evitando los productos transgénicos que hacen tanto daño a la salud.

Este es mi sueño, sin embargo como empezar a hablar de un mandatario ideal sin tocar el termino política, si le preguntamos a cualquier persona ¿para usted qué significado tiene la política? Muchos responderían con un gesto o una mueca y tal vez nos dirían: “es el arte de robar”.

Otros habitantes, con más esperanzas podrían contestar que la política es una organización donde hay personas que dirigen y protegen a un pueblo o país y su función es la de ayudar a las personas que lo necesitan. Pensadores más letrados podrían argumentar que un político debe cumplir con una concepción de orden, además de una interacción con los demás, donde facilite instrumentos que ayuden a mejorar las condiciones sociales.

Pero si me preguntan a mi acerca del mandatario ideal, les respondería sin titubear que debe ser un buen líder, con carácter, compromiso, buena comunicación, generosidad, pasión en la medida en que disfrute de lo que hace, debe ser un mediador de los problemas públicos.

¿Será que yo espero demasiado de las personas? tan sólo desearía que el candidato que tiene en sus manos el futuro de la región sea una persona humilde, conocedora de las necesidades del pueblo, un buen administrador de los recursos de la nación, que conozca de la administración pública, que sea carismático, realmente no me interesa de dónde provenga, ni que cantidad de títulos o diplomas tenga en su casa o finca colgados de la pared, simplemente que tenga un gran interés por luchar por los derechos de la comunidad y ayudar a las personas en lo que más pueda.

Necesitamos un líder que no solamente escriba un libro gigante que representa su plan de gobierno, sino que demuestre a través de acciones lo que hay allí plasmado, que sea una persona autónoma y que no se convierta en un títere de los políticos de turno, debe ser transparente, hacer buena gestión un buen administrador de los recursos públicos, que genere confianza en el pueblo, ayudando al desarrollo de la región y a la construcción de un país más justo y equitativo en el que podamos vivir tranquilos.