RICHARD AGUIRRE
NEGOCIOS | LA PATRIA
"Prendado estoy de una hermosa
Por quien la vida daré
Si me acoge cariñosa:
Porque es cándida y hermosa
Como la flor del café...".
Poema: La Flor del Café. Gabriel de la Concepción Valdés.
"Un café por favor": la frase que nunca pasará de moda en Manizales.
Las cafeterías o establecimientos comerciales dedicados a la venta y comercialización de productos de café llegan a los 652, entre Manizales y Villamaría, de acuerdo con el registro de la Cámara de Comercio de la ciudad.
Sin embargo entre 30 y 35 son conocidas como coffe shops (tiendas de café). De acuerdo con Andrés Soto, jefe de expertos de barismo del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) en el país, las cafeterías crecen y crecen en Manizales, en parte, porque se fortalece el arraigo por la cultura cafetera y por la formación de baristas en la región. Actualmente hay unos 100 en formación en esa institución. "Las cafeterías de ahora venden experiencias a los clientes y promueven la cultura cafetera", así explica Soto este fenómeno. El valor de un café americano está entre $1.200 y $1.800, y un granizado puede costarle entre $4 mil y $6 mil.
Para los consultados la alta competencia no afecta sus negocios, por el contrario piensan que se fortalecen, pues al existir más cafeterías, más clientes tienen la posibilidad de tomar café de alta calidad.
Clara Eugenia Serna, propietaria, explicó que el negocio nació de una necesidad, porque no tenían trabajo estable. "Tuvimos mucho miedo y expectativas, pero valió la pena", mencionó. Los 10 años de tradición le dan autoridad para asegurar que se lanzaron en el momento justo. "Ahora hay más competencia y lo pensaría dos veces para montar el negocio", agregó. Según ella, decidirse es lo más duro de arrancar, porque hay que aguantar mucho al principio. "Los resultados no se ven en los primeros meses, pero hay que persisitir", aconsejó.
De acuerdo con los consultados, entre miércoles y viernes son los días más fuertes de la semana para la venta de café o bebidas a base del grano. En cuanto a horarios, entre 3:00 y 6:00 de la tarde, la jornada es más movida.
28 empresarios y trabajadores de los coffe shops de la ciudad estudian en el Sena y serán certificados en barismo y preparación de bebidas a base de café. De acuerdo con Axel Vega, instructor del curso, la meta es que los empresarios estandaricen sus procesos y productos, lo que generaría más calidad en Manizales. "Queremos mejorar la calidad de los cafés que se les ofrecen a los turistas o visitantes. Lo más importante es la receptividad que hemos tenido, porque así vamos a mejorar todos", explicó. El curso tiene una intensidad de 80 horas.
Ana María Sierra, coordinadora del programa nacional Toma Café, aseguró que Colombia tiene una inversión que pocos países del mundo hacen para generar notoriedad sobre la oferta turística. Explicó que por esto el café colombiano lleva 80 años posicionándose en el mundo y no solo como bebida, sino que está en el imaginario de las personas y lo relacionan con el país. "El problema es que cuando llega el turista se lleva la sorpresa de consumir un café que deja mucho que desear. Toma Café promueve el consumo interno y en la medida en que trabajemos juntos, la expectativa del turista se cumple. Tenemos que cambiar el chip, ofrecer café de calidad en donde están los turistas", afirmó.
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