Las velocidades para un nuevo Acuerdo Final con las Farc

Óscar Veiman Mejía

LA PATRIA Manizales

El Gobierno habla de un nuevo Acuerdo, elaborado con celeridad y en procura de un pronto resultado. Así lo establece en el comunicado emitido con las Farc el jueves pasado, tras reuniones en La Habana.

Además, el presidente Santos mencionó, en cada salida, el objetivo de tener acuerdos muy rápidos, al referirse a las propuestas de los promotores del No, entre ellos el Centro Democrático.

Hoy hace un mes Colombia vivió el plebiscito. En la mañana los pronósticos favorecían al Sí, en la tarde llegó la sorpresa con el triunfo apretado del No.

Vicente Torrijos, politólogo, periodista e internacionalista, considera que lo importante no son los tiempos, sino la revisión de puntos fundamentales del Acuerdo como justicia, reforma rural, entre otros.

"Podemos tener acuerdos muy rápido"

Juan Manuel Santos

* "Las reuniones con los distintos grupos del No se han desarrollado en la dirección correcta. Parte del equipo negociador de Humberto de la Calle estuvo reunido con Álvaro Uribe y hubo avances importantes y lo celebro...".

* "La instrucción a los negociadores del Gobierno es que no se levanten de la mesa porque podemos tener acuerdos muy rápido”.

* "Existe de parte nuestra toda la voluntad y decisión para llegar a buen final en el diálogo. Di instrucciones que se devolvieran a La Habana el jueves y continuar el trabajo para tener un nuevo acuerdo ya, lo más pronto posible”.

* “Seguir negociando, seguir dialogando, encontrando puntos de acuerdo lo más pronto posible".

*  “Soy optimista. Tenemos toda la voluntad y disposición de unirnos todos en torno a un nuevo acuerdo de paz que implementemos a la mayor brevedad posible”.

* "Ayer en la visita a Inglaterra dijo que diversos sectores sociales lo visitan “pidiendo que salvemos el Acuerdo y que lo hagamos lo más pronto posible”.

Lo que importa es el contenido, no los tiempos

Vicente Torrijos, profesor emérito de ciencia política de la Universidad del Rosario de Bogotá:

- ¿Qué tanto perjudica que pasen los días y el Acuerdo siga en negociación?

El resultado del plebiscito exige una revisión estructural de unos acuerdos que ya para este momento no existen. Eso significa que la renegociación en busca de un consenso, de un gran pacto nacional, tiene que pasar por la revisión exhaustiva de los puntos que conformaban el anterior acuerdo. Eso puede tardar varios días, pero lo importante no es el tiempo sino el contenido mismo, si realmente ese nuevo texto que el Gobierno pueda construir con las Farc atiende o no la voluntad popular expresada el 2 de octubre. Porque si simplemente se maquilla y se retoca el Acuerdo que ya no existe, jurídicamente, y se presenta a un nuevo plebiscito, eso en vez de conciliar, fácilmente de comprender, lo que logrará es lo contrario: polarizar más al país.

- ¿Cómo evitar más polarización?

El presidente Santos dijo a la agencia Efe que se trataba de evitar un país en llamas. La única forma, a mi juicio, de que se evite eso es que las Farc y el Gobierno comprendan el verdadero espíritu de la votación en el plebiscito. Ahí está la esencia del problema, no tanto en las 300 páginas sino en las 3 o 4 que tienen que ver con temas de alta intensidad, pues las restantes son accesorios, temas de baja intensidad, sobre los que no debe renegociarse nada. Los cuatro o cinco que deben atender la voluntad son los que decidirán si el país puede transitar armónicamente a un verdadero acuerdo nacional de paz.

- ¿Ve voluntad en el Gobierno y las Farc para ceder en esos puntos?

Tarde o temprano tendrá que hacerse público cuál es el pensamiento de las Farc al respecto, en qué temas están radicalizados y en cuáles no. En el fondo son temas que no aceptan visiones parciales ni porcentajes. Por ejemplo, en materia de sustitución de la Constitución mediante la incorporación del Acuerdo, como tratado especial, al bloque de constitucionalidad, es muy difícil que en eso haya apreciaciones parciales, no resiste interpretaciones intermedias. Repito, son cuatro o cinco macrotemas, lo demás es accesorio. Si en eso no hay un avance esencial, pues todo lo demás puede ser un maquillaje.

- ¿Qué pasa si no se atienden esos cinco puntos?

Sería grave para la democracia y para el futuro no solo de esta negociación con las Farc, sino lo que es peor para la forma en que se negocia con el Eln. Recordemos que la estrategia revolucionaria es que en cada fase de negociación se supere la anterior. Con lo cual es normal que el Eln tenga unas aspiraciones que sean más significativas que las propias de las Farc.

- ¿Qué tanto riesgo hay de que se rompa el cese al fuego bilateral?

Las Fuerzas Militares colombianas están absolutamente subordinadas al poder civil, no hay evidencia de que hayan desobedecido órdenes presidenciales, o estén actuando por su cuenta y riesgo. De tal forma, que no es por el Estado que se llegue a una violencia del cese bilateral. Cuando se apela afanosamente al problema de que se puede romper el cese se incurre, voluntaria o involuntariamente, en una especie de chantaje para presionar una renegociación por la vía rápida, que solo consiste en un retoque de temas parciales cuando se sabe que los de fondo son los verdaderamente importantes.

- ¿Y cuánto podrá aguantar la guerrilla este cese?

La guerrilla presiona a la oposición y a la fuerzas del No para que no extiendan mucho el diálogo y para que no profundice tanto en los temas más delicados. Los voceros del No están empeñados en que la voluntad popular se respete.

- ¿Si esto se alarga, qué tanto esperarán los países que han prometido ayudas para el posconflicto?

Ellos no pueden ni quieren intervenir en asuntos internos, la noción de demora solo está en mentes de quienes lo dicen. En procesos sociológicos e históricos tan profundos los tiempos son muy relativos.La comunidad internacional entiende que las sociedades deben manejar sus problemas con ritmos que les son propios. Y ellos estarán dispuestos a ayudar en el momento oportuno, así haya inconvenientes.

- ¿Ese es el procedimiento de la ONU?

La ONU es consciente de que en unos procesos políticos y sociales en los que no haya la suficiente armonía, consenso, pacto nacional genuino para respaldar las negociaciones, en vez de contribuir a la paz lo que se estaría es blindando a unos generadores de violencia, aunque sean el fruto de una negociación. Este tipo de organizaciones y paísescon más experiencia en manejo de conflictos son cautelosos para no imponer ritmos de acuerdo con agendas.

- ¿Qué tanto ha influido o influirá el Nobel de Santos para dinamizar el Acuerdo final?

No, el Nobel ya es anécdota en la vida nacional. Es un honor personal, no sé si el presidente debió declinar ese premio, como otros lo han hecho en la historia, o si debe aceptarlo. Es muy de la conciencia de cada uno. El premio ni tiene transcendencia institucional ni histórica, ni sociológica en el desarrollo del conflicto, no es más que un honor en la biografía de un presidente.

- ¿Habla usted de un efecto bumerán con este premio?

Santos dijo que el Nobel le dio un impulso personal para atenuar los efectos del No. En muchos sectores ha sido tomado como un efecto bumerán, en vez de ser bien visto ha generado más disociación porquese sospechaba que en el fondo había un ánimo personal de tenerlo a toda costa. Solo tendría un impacto nacional si, por ejemplo, se trabajamediáticamente para que el día que reciba el Nobel diga que ya tiene un nuevo acuerdo logrado con retazos de los diferentes sectores yvoceros del No y convoque un nuevo plebiscito antes de Navidad.

- ¿Qué tanto influirá este momento nacional en las elecciones presidenciales del 2018?

A eso le veo una conexión directa y un impacto profundo porque no hay duda de que este tema seguirá siendo el principal de la agenda, sobre todo porque si algo puso al descubierto la votación en el plebiscito es que lejos de ser lo que pregonaba el Gobierno, que era el fin de la guerra, pues en Colombia el conflicto continúa por muchos factores generadores de conflicto y hay muchos actores que están interesados en generar más violencia y han sido aliados estratégicos de las Farc, me refiero concretamente al Eln. Quedó claro con el esfuerzo fallido, que cada vez era más traumático negociar con el Eln, lo que evidencia que no era el fin del conflicto, ya que las Farc son apenasuna faceta del conflicto. En la agenda para la Presidencia estarán las Farc, Eln, bacrim, Venezuela, que forman parte del mismo paquete.