Colprensa | LA PATRIA | Bogotá
El quinto ciclo de negociaciones de paz entre la guerrilla del Eln y el Gobierno Nacional empezó a correr. Las expectativas siguen puestas sobre la posibilidad de continuar los diálogos con la extensión del cese al fuego bilateral y el impacto que tendrán los cambios hechos a la delegación por el presidente, Juan Manuel Santos.
La guerrilla, cuyo cese al fuego bilateral con el Gobierno termina hoy, aseguró que evaluará esta primera experiencia para proyectar un nuevo alto en las acciones bélicas.
"Reconocemos que este cese aportó en algo a aliviar la situación humanitaria de millones de compatriotas, sobre todo en aquellas regiones donde es más crítica la situación de guerra y de persecución política contra líderes y comunidades que se oponen al régimen dominante", indicó la guerrilla en Twitter.
La insurgencia, que retoma en Quito las conversaciones de paz con el Gobierno, aseguró que ha escuchado los pedidos de diversos sectores para que los diálogos se desarrollen en medio del cese bilateral.
Para ello, explicó, "en la mesa evaluaremos esta primera experiencia para proyectar nuevos momentos de cese bilateral".
Por el lado del Gobierno la situación es más que alentadora, luego del anuncio hecho por el presidente Santos a través de Twitter: “Estamos más que dispuestos a prorrogar el cese al fuego con el Eln y a renegociar las condiciones de un nuevo cese”, escribió.
Entre tanto, ayer la Conferencia Episcopal y la Misión de Verificación de la ONU en Colombia hicieron un llamado para que ambas partes intenten preservar los logros obtenidos en reducción de violencia durante la vigencia del cese al fuego bilateral.
“Somos conscientes de las dificultades que ha tenido el cese al fuego y la falta de consenso en la implementación de ciertos aspectos de los acordados en Quito (Ecuador)”, sin embargo, la Iglesia y la ONU afirmaron que “comparten la necesidad de un acuerdo de cese al fuego más robusto, que genere mayor confianza entre las partes y en la sociedad colombiana”.
El nuevo ciclo de conversaciones se dedicará, según el Eln, a "desarrollar la participación política de la sociedad por medio de un diálogo nacional que avance hacia un pacto de paz basado en los cambios básicos urgentes que exigen las mayorías".
En el comunicado la guerrilla se refiere también al "derrumbe" del proceso de paz con las Farc y denuncia el incumplimiento del Gobierno del acuerdo firmado en el 2016 con ese grupo que ya dio su salto a la política.
En Quito las partes acordaron un cese al fuego entre el 1 de octubre del 2017 y el 9 de enero del 2018.
Un enfrentamiento entre disidentes de las Farc e integrantes del Eln dejó al menos cuatro muertos y seis retenidos por los grupos ilegales, informaron fuentes oficiales.
El hecho se registró en la vereda Santa Rosa, del municipio de Policarpa, en el departamento de Nariño, en donde integrantes de ambos grupos armados se enfrentaron por el control de la zona.
La alcaldesa de Policarpa, Claudia Cabrera, dijo que se desconoce cuál grupo retuvo a las seis personas.
Ayer se efectuó un Consejo de Seguridad en el que participaron las diferentes autoridades de la zona para determinar las acciones que se adelantarán para controlar la situación.
Nariño es uno de los departamentos de Colombia en donde hacen presencia las disidencias de las Farc que no se acogieron a la firma del acuerdo de paz con el Gobierno nacional.
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