COLPRENSA|LA PATRIA|CARTAGENA
Una llamada que hizo un ciudadano fue clave para que el Gaula de la policía de Barranquilla rescatara el martes en la noche a un bebé de pocas horas de nacido que había sido raptado ese día en la tarde del hospital Jesús de Nazaret por una mujer que la sacó dentro de un bolso sin que los vigilantes del sitio asistencial se dieran cuenta.
Las autoridades contaron que luego de que muchas personas estuvieron alerta desde de la desaparición del bebé, una llamada al 123 fue clave para que se diera con el paradero de la mujer que fue denunciada por los vecinos que la pudieron identificar por las fotografías que salieron publicadas en páginas de Internet y en las redes sociales.
Luego de la alerta, las autoridades se trasladaron hasta el barrio Campo Alegre y encontraron a la mujer en una residencia de la calle 84 con carrera 41. La delincuente se desmayó al ver a los miembros del Gaula de la policía del Atlántico. Durante el registro de la casa hallaron en una habitación al menor.
La supuesta secuestradora fue identificada por las autoridades como Edith María Molina Charris, de 41 años de edad, y natural de Juan de Acosta (Atlántico), quien luego del desmayo fue llevada hasta un centro de salud para que fuera atendida y cuando se recuperó la trasladaron a la unidad de reacción inmediata de la fiscalía de Barranquilla.
Los hechos
El bebé fue raptado a eso de las 2:00 de la tarde del martes y desde entonces se alertó a la ciudadanía, que fue clave para dar con el paradero de la supuesta raptora. La madre es natural del municipio de Santa Lucía (Atlántico), y según se supo, tiene 16 años.
Según se pudo establecer, la mujer estuvo merodeando toda la mañana por los alrededores del hospital Jesús de Nazaret y aprovechó un descuido de la madre y de las enfermeras para tomar al bebé y meterlo en un bolso, el cual pudo pasar por la puerta sin que los vigilantes pudieran sospechar.
Desde que se supo del rapto, las autoridades tomaron las imágenes grabadas en las cámaras de seguridad del centro asistencial y empezaron a divulgarlas a través de las redes sociales y en las páginas de Internet, lo cual fue clave para que se diera con el sitio donde se ocultaba Edith María Molina Charris, quien deberá responder por el supuesto secuestro del menor.
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