COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ
“¿Y existen informes suyos sobre qué fue lo que a usted le pareció sospechoso de esos pagos?”. La pregunta se la hicieron al exauditor de Corficolombiana Jorge Enrique Pizano (q.e.p.d.), durante el testimonio que rindió ante el Tribunal de Arbitramento de la Cámara de Comercio de Bogotá, que buscaba resolver un conflicto entre la Concesionaria Ruta del Sol y la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
La declaración fue rendida el 23 de enero de este año y Pizano allí ratificó que, en su momento, entregó la información de irregularidades a las directivas de la firma. Bajo la gravedad de juramento señaló que de las “investigaciones fue informado Corficolombiana, Odebrecht y las investigaciones fueron en el 2015 realizadas por el Grupo Aval, por la vicepresidencia del contralor del grupo Aval, la cual realizó unas observaciones a Odebrecht sobre los contratos firmados y que lo que conllevó fue a las modificaciones de los estatutos (sic)”.
Esta sería la segunda prueba de que, en su momento, Pizano sí dio a conocer las irregularidades que se entretejieron en torno a los contratos falsos que desde varias compañías se suscribieron para pagar los millonarios sobornos que tienen como protagonista principal a la brasileña Odebrecht.
Según la cuenta de la Fiscalía, los contratos simulados en la Ruta del Sol tendrían un monto de 65 mil millones de pesos, que habrían sido pagados a las firmas Consultores Unidos Colombia, Consultores Unidos Panamá, Profesionales de Bolsa, SION y TTU (Técnicas Territoriales y Urbanas).
Justamente sobre Consultores Unidos, los abogados del Tribunal de Arbitramento le preguntan acerca de los contratos y del monto que le giraron a esa firma, a lo que Pizano respondió: “Son variados, como 8 mil millones (de pesos), aproximadamente”.
Consultores Unidos tuvo como representante legal a un recordado personaje en el mundo de la banca nacional: Eduardo José Zambrano Caicedo, quien hace años se vio envuelto en un escándalo relacionado con el ya desaparecido Bancoquia. Su nombre también aparece en un testimonio que rindió ante el Consejo de Estado en el expediente por la pérdida de investidura de los senadores Bernardo Miguel Elías y Plinio Olano Becerra.
Ante ese alto tribunal, Caicedo (también detenido por el escándalo Odebrecht), relató: “Por solicitud de Eleuberto Martorelli incrementó el valor de dos contratos celebrados con esa firma, cuyos excedentes fueron entregados a Federico Gaviria y Plinio Olano Becerra, que sumaron más de 10 mil millones de pesos”.
Pizano padecía cáncer. Su salud se había deteriorado y su muerte, rodeada de un escándalo por el hallazgo de un tarro de cianuro en su finca, fue producto de un infarto, conforme al dictamen de necropsia elaborado por un médico del Hospital de Facatativá.
En su testimonio, Pizano deja en claro que los informes sobre los contratos cuestionados le fueron entregados a: “Alberto Mariño Samper (miembro de la junta directiva de la Concesionaria), al doctor Rafael Eduardo, que es el miembro de la junta directiva por Episol, y al doctor Rafael Eduardo Neira, vicepresidente contralor del grupo Aval”.
El nombre del grupo Aval ha salido a la palestra pública en estos días en medio de las revelaciones de los audios que el mismo Pizano entregó y que dan cuenta de las conversaciones que tuvo con el entonces abogado de ese conglomerado económico, Néstor Humberto Martínez, hoy fiscal general de la Nación.
A raíz de ello, Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, presidente del emporio, envió un comunicado a los colaboradores de las empresas que hacen parte de Aval, en el que les da su versión de los hechos que los tienen en el ojo del huracán.
Dice Sarmiento Gutiérrez: “Convencidos de la importancia de contribuir al desarrollo de la infraestructura vial de Colombia, en el 2009 nos asociamos como socios minoritarios y no operadores de la sociedad Concesionaria Ruta del Sol (…) Con esta asociación obtendríamos esencial y necesaria experiencia que en el momento no teníamos en la construcción de mega carreteras”.
Aunque no lo menciona directamente, en la misiva que llegó a través del correo institucional de los trabajadores, Sarmiento se refiere a Odebrecht como: “Nuestro socio, que lejos de merecer reproche alguno, era considerado a nivel global como uno de los principales ejemplos de conocimiento y profesionalismo”. Ese mismo socio es el que hoy los tiene contra las cuerdas.
Y para el presidente de la firma, están “siendo víctimas de acusaciones falsas e irresponsables”, aunque no precisa cuáles.
Como auditor de Corficolombiana, Pizano tenía bajo su responsabilidad el Sistema de Administración del Riesgo de Lavados de Activos y Financiación del Terrorismo (Sarlaft). Esta plataforma, que depende de la Unidad de Análisis de Información y Análisis Financiero, busca evitar que al sistema financiero nacional ingresen recursos de actividades ilícitas, así como detectar y reportar operaciones sospechosas con las que se pretendan dar apariencia de legalidad.
Pizano encontró anomalías en el manejo de esta plataforma y así lo expuso a los integrantes del Tribunal, a quienes les precisó que el sistema Sarlaft fue presentado ante la Junta Directiva el 22 de septiembre del 2012.
“Se entregó un manual a todos los funcionarios en donde se determinaba cuáles eran los objetivos, sus políticas, sus procedimientos y básicamente el conocimiento de los contratistas (…) cuáles eran los instrumentos que se tenían para detectar situaciones inusuales, cuáles eran las alertas que quería”, expuso Pizano.
El exauditor les confió a los árbitros que se hicieron capacitaciones, se elevaron las advertencias y se entregaron las recomendaciones de rigor, pero, pese a ello, detectó que hubo contratistas que no habían surtido el procedimiento del Sarlaft. Por estas inconsistencias se levantaba un memorando a cada área responsables.
“Informaba y no solamente a Corficolombiana, sino que como era mi obligación, al presidente de la Concesionaria y a los gerentes de las áreas. Es que debemos de tener claro es que el administrador de la Concesionaria era el socio mayoritario de acuerdo con estatutos que era Odebrecht. Es más, he informado a la Fiscalía General de la Nación de aquellos informes que me ha solicitado la misma Fiscalía cuando fui citado el año pasado en mayo, por la fiscal 80, Amparo”, enfatizó.
La fiscal Amparo a la que hace referencia es Amparo Cerón, quien bajo su tutela ha cursado la investigación por este escándalo y la misma que en octubre tuvo un accidente de tránsito en Chile, mientras estaba de paseo con su familia. Por la gravedad de las lesiones, aún no se ha reincorporado a su cargo.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015