Colprensa | LA PATRIA
El hacker Andrés Fernando Sepúlveda solicitó formalmente acogerse a la Jurisdicción Especial de Paz.
Su abogado Carlos Toro informó que radicó la petición ante el Juzgado Tercero Penal del Circuito de Ejecución de Penas de Ibagué una solicitud para que su cliente sea beneficiario de la amnistía de iure que tiene la Ley de Amnistía y, por tanto, se le otorgue la libertad condicional e inmediata.
"Los delitos cometidos por él fueron realizados conexos con el delito político y en relación con el conflicto armado colombiano", dijo Toro.
Sepúlveda fue condenado a 10 años de prisión después de avalarse un preacuerdo en el cual aceptaba su responsabilidad en cinco delitos que la Fiscalía le imputó, y se comprometió a colaborar en los casos relacionados a las interceptaciones ilegales que se habrían realizado desde la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga.
En la solicitud de 42 páginas, Toro le pidió al juzgado que se extinga la sanción penal dictada en contra de Sepúlveda por los delitos de espionaje, concierto para delinquir agravado, acceso abusivo a un sistema informático, violación de datos personales y uso de software malicioso por los que fue condenado en 2015.
De acuerdo con el abogado, las actividades que hizo Sepúlveda para 'hackear' las comunicaciones de los negociadores de paz de las Farc en La Habana en 2014 califica como una actividad contrainsurgente.
El abogado insiste en que la causa de los delitos cometidos por el hacker fue el conflicto y afirma que este se concertó con el Centro Democrático en plena campaña presidencial, teniendo en cuenta su "total repudio" a las conversaciones que entonces adelantaba el Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos con las Farc.
"Las conductas punibles que se enrostraron a mi defendido, fueron ejecutadas, bajo el influjo de la visión política que el señor Sepúlveda Ardila tenía del conflicto armado interno; ya que para él, y los demás adeptos a la doctrinas ultraderechistas, cuyo principal exponente es el ex Presidente y hoy senador Álvaro Uribe Vélez, las FARC no eran un grupo subversivo con la aspiración política de tomarse el poder por la vía armada para cambiar las instituciones político jurídicas del Estado colombiano, sino una organización terrorista sin fines políticos, a quienes había que derrotar militarmente, o quienes debían simplemente capitular ante el Estado, entregar sus armas y pagar con cárceles los crímenes que se les atribuyen durante 50 años de enfrentamiento armado con el Estado", agrega la petición.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015