Efe | LA PATRIA | Bogotá
El líder social Leyner Palacios, ganador en 2017 del Premio Pluralismo Global por reivindicar los derechos y la lucha de las víctimas del conflicto, fue amenazado de muerte en el departamento del Chocó.
"Le dieron 24 horas para salir del departamento", afirmó en Twitter María José Pizarro, representante a la Cámara de la izquierdista Lista de la Decencia.
Las amenazas contra el líder social -que perdió 32 allegados en la matanza del 2 de mayo del 2002 en Bojayá- llegaron un día después de que el defensor del pueblo del Chocó, Luis Murillo, confirmara que los moradores del caserío de Pogue, que hace parte de ese municipio, están confinados por la presencia de hombres armados de las paramilitares Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc).
La llegada de los hombres armados impide la libre movilización de los habitantes de Pogue, situado en una margen del río Bojayá.
En noviembre pasado, Leyner Palacios afirmó que el llamado que hacían al Gobierno las comunidades de Bojayá es a que retome los diálogos de paz con la guerrilla del Eln, en punto muerto desde enero del 2019. "El hecho de no dialogar con el Eln es condenarnos a unas comunidades que hemos mostrado una posición en favor de la paz, es condenarnos a la muerte y a eso no estamos dispuestos", dijo.
Graves denuncias
José de la Cruz Valencia, que hace parte del Comité por los Derechos de las Víctimas de Bojayá, explicó que el tema sigue siendo complicado porque continúa la materialización de lo que denuncian desde hace unos meses la Defensoría del Pueblo y la Iglesia.
El pasado 17 de noviembre, durante los actos de entrega a la comunidad de los restos de cerca de un centenar de víctimas de la matanza en Bojayá, organizaciones sociales y la Diócesis de Quibdó advirtieron al Gobierno sobre el inminente riesgo de que ocurra una nueva masacre en la zona.
Valencia dijo que la presencia de paramilitares es un punto más que se ha dado en la comunidad de Pogue, de donde procedían muchas víctimas de la matanza cometida hace 17 años en Bojayá.
Esa masacre, una de las peores del conflicto armado colombiano, ocurrió cuando una bomba lanzada por la guerrilla de las Farc, durante un combate con paramilitares, cayó en la iglesia donde se refugió parte del pueblo y mató a unas 79 personas, aunque otras cifras hablan de 119 muertos y decenas de heridos.
Presencia
El ministro del Interior (e), Daniel Palacio, aseguró que hay total control militar de la zona de Bojayá, en donde la población denunció que unos 300 hombres con armas largas los mantuvieron retenidos en sus regiones con amenazas de violencia. Esas declaraciones las dio después de una vista a La Loma, Corazón de Jesús, Pogue y Cuia, poblaciones de ese sector de Chocó.
Al respecto, el ministro señaló que el desde el jueves ya tomaron medidas por las Fuerzas Militares para reforzar la seguridad en esta zona.
Palacio también anunció que Leiner Palacios tendrá seguridad para seguir ejerciendo su labor. “El Gobierno Nacional le dará todas las medidas de seguridad para que siga ejerciendo la labor social tan importante que ejerce en el departamento del Chocó. Ningún bandido le va a decir a un líder social en Colombia qué puede y qué no puede hacer”, dijo el ministro encargado.
Por su parte el director de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez Andrade, quien hizo parte de la comisión que viajó ayer a Chocó informó que solicitó la activación de planes de contingencia, impulsando la convocatoria de los Comités de Justicia Transicional y acompañó la realización de misiones humanitarias a las zonas afectadas por riesgo o emergencias humanitarias con el objetivo de atender a la población.
Este es el segundo grupo de avanzada gubernamental que se traslada a Bojayá, después de que se conocieran de las alertas humanitarias, que según el recién posesionado alcalde de Bojayá, afecta al menos a siete mil personas, entre los que hay varios menores de edad.
Finalmente, José Miguel Vivanco, director de la entidad interLa Defensoría reportó un posible confinamiento de hasta 600 personas y la incursión, según la población, de 300 milicianos.nacional Human Rights Watch, emitió un mensaje n el que pidió que el Estado colombiano tome acciones efectivas en Pogue. "Colombia: muy preocupante situación en Bojayá, Chocó, donde grupos armados asedian a la población. Debe haber una respuesta efectiva y sostenible en el tiempo que proteja a la población civil en terreno", escribió Vivanco en su cuenta de Twitter.
Los bojayaseños han estado en el ojo del huracán por cuenta de la presencia de miembros del Clan del Golfo y del Eln, quienes pretenden apropiarse del territorio para hacer de este un negocio criminal.
La Defensoría reportó un posible confinamiento de hasta 600 personas y la incursión, según la población, de 300 milicianos.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015