LA PATRIA | Manizales
Juan es el padre de un niño de 10 años. La familia decidió, en julio pasado, cambiarlo de colegio. "Mi hijo sentía presión y estaba incómodo". Por eso, solicitaron un certificado de la institución con el fin de presentarlo en el nuevo plantel. El escrito emitido por el Preescolar lo tiene dolido, sobre todo por incluir referencias de comportamientos que considera naturales e íntimos del menor.
Se refiere al Informe descriptivo-académico disciplinar, entregado por una institución privada de Manizales. Para el señor los comentarios del texto se salen del ámbito académico y disciplinario para pasar a aspectos de la personalidad infantil.
El inicio destaca las cualidades del estudiante. "… se caracteriza por ser un niño extrovertido, risueño y dispuesto a ayudar cuando se propone". Se agrega: "… ha demostrado que tras una larga motivación entre la familia y los profesores es capaz de comprometerse y mejorar comportamentalmente en el aula...".
La segunda parte es la que tiene indignado al padre. Comenta que la directora de grupo y la rectora plasmaron en el informe la pereza y fastidio que le tienen al alumno. "Dan referencias que para llevar a otra institución no son aptas, ya que más parecen referencias para remitirlo a un sicólogo o un siquiatra...".
En el encabezado de una lista de 11 puntos se dice que en el tercer semestre se evidenciaron cambios en el niño. Describe que se raya las manos de manera reiterada, que le alzó la voz a una docente, que hizo comentarios inadecuados para su edad, entre otros.
El dolor y la tristeza que expresa Juan lo motivan principalmente el numeral 11. "El estudiante realiza comentarios a compañeros de clase sobre sus inclinaciones sexuales, diciéndoles que se siente atraído por el compañero..., luego se molesta porque las niñas hacen comentarios sobre él, aunque sabe que es el precursor de estos".
Respuesta
La rectora de la institución reconoce que hubo un error al entrar en detalles personales del alumno. "Mi falla fue que firmé el documento sin leerlo".
Añade que tiene claro que en ese tipo de referencias no se pueden tocar elementos íntimos. "Sabemos que los niños están en constante formación, que hay cosas que son producto de su imaginación. Los asuntos se tratan con los padres y además tenemos un departamento de psicología".
También respondió que es un caso aislado. "La persona que lo escribió es nueva. Ya le dijimos que ese tipo de cosas no se escriben. Le pedimos disculpas al papá y que estábamos dispuestos a cambiar el texto. Llamamos al nuevo colegio del niño para decirles que nos equivocamos en la referencia".
Juan añade que el asunto no se puede quedar así. Primero porque reitera que el certificado es salido de tono y vulnera derechos del niño. Y segundo, para que no se repita en otros centros educativos.
Por eso, ayer andaba con el papel en mano por la Defensoría del Pueblo y la Secretaría de Educación de la ciudad. "No me podía quedar callado con esta tristeza".
Ponga la queja
En la Secretaría de Educación de Manizales se reiteró el llamado a los padres y comunidad en general a denunciar casos de maltrato, discriminación, acoso, entre otros.
Luis Ángel Gómez, de la Secretaría de Educación de Manizales, dijo que los asuntos deben ser expuestos ante la Unidad de Calidad para ser analizados y tomar decisiones.
La dignidad
El artículo 33 del Código de Infancia habla del derecho a la intimidad de los niños, mediante la protección contra toda injerencia arbitraria o ilegal en su vida privada, la de su familia, domicilio y correspondencia. Así mismo, serán protegidos contra toda conducta, acción o circunstancia que afecte su dignidad.
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