Al filo de la incertidumbre en barrio Viña del Río

ANDRÉS RODELO

LA PATRIA | MANIZALES

Yeimi Parra escuchó un sonido a la 1:00 a.m. de ayer y se levantó asustada. Vive en el barrio Viña del Río, de Manizales, en donde la Constructora 360 edifica un conjunto con el mismo nombre del sector. Ella sospechó que el ruido era por un movimiento de tierra y tenía razón.

En la zona se adelanta, desde febrero pasado, una obra que tiene su parte baja a un lado de la Avenida Kevin Ángel, en la carrera 14 con calle 50A, y cuyo predio se alza por un terreno inclinado (talud) hasta las inmediaciones de Viña del Río. Cuando Parra se asomó al borde de la carretera del barrio que limita con la construcción, confirmó que un pedazo del talud se desprendió, de allí el sonido que escuchó.

Su preocupación y la de otros residentes del barrio es que el talud se desprenda más hasta el punto de que pueda provocar el deslizamiento de una vivienda. LA PATRIA estuvo ayer en el sitio y contó tres metros entre el borde del talud y la vivienda más cercana.

Asustados

"Mi casa tiene grietas y se me han roto tejas por la remoción de piedras que realizan en esta obra. La comunidad se siente sola. ¿Debemos esperar a que se deslice una casa para que nos escuchen?", se pregunta Yeimi Parra. Edwin Alejandro Olmos es el propietario de la vivienda que está más cerca del talud. "Mi casa tiene grietas que aumentan a medida que la obra avanza. Tengo dos niños pequeños que están asustados por lo que pueda ocurrir".

Sandra Milena Giraldo es otra habitante del barrio: "Nos dijeron que la construcción no nos afectaría. Hay pequeñas grietas en las viviendas que se abren progresivamente. Ayer vino la Unidad de Gestión del Riesgo y acordó que solo pondrían un plástico para mitigar la situación".

La otra molestia es porque la Constructora instaló un cerramiento para que los vehículos no parqueen cerca del talud. "Ese cerramiento lleva 5 meses y nos dijeron que solo estaría allí por 3 meses. Ocupa la mitad de una vía de acceso al barrio. Nos tiene afectada el tránsito", manifestó Olmos.

Residentes también piden que se retire este cerramiento de la construcción, pues ocupa parte de una vía principal del barrio.

Dice la constructora

Henry Narváez, ingeniero de la Constructora 360, mencionó que construyen un muro de contención para evitar más deslizamientos. "Ahora empezaremos a llenar el muro para que no haya más riesgo. No pasará nada, la comunidad puede estar tranquila, al igual que el propietario de la vivienda más cercana al talud".

Narváez dijo que tienen los permisos de la Secretaría de Tránsito para el cerramiento. "Los extendimos hasta octubre. Esto se hizo para que los carros no parqueen cerca del talud y generen sobrepeso, lo que podría provocar un accidente".

El secretario de Tránsito, Carlos Alberto Gaviria, se comprometió a revisar la situación, pero aclaró que no hay inconveniente si la firma cuenta con los permisos.

Narváez agregó que el equipo de la construcción visitó las casas antes de que empezara la obra para verificar el estado de estas. "En los próximos días haremos otras visitas domiciliarias para comprobar si han surgido grietas".

La causa

Jairo Alfredo López, director de la Unidad de Gestión del Riesgo de Manizales, explicó: "Las lluvias recientes infiltraron agua en la ladera, lo que produjo un desprendimiento de capa vegetal. Ayer visitamos el sitio y no encontramos síntomas para evacuar de manera preventiva la vivienda más cercana al talud. Las grietas que presenta son leves y es difícil asociarlas a la obra. Elaboramos un informe y dimos recomendaciones al constructor".