Maestro y discípulo, como telón París

EFE | LA PATRIA | PARÍS

El presidente electo de Francia, Emmanuel Macron, y el mandatario saliente, François Hollande, escenificaron ayer un simbólico apretón de manos bajo el Arco del Triunfo parisino, donde celebraron los 72 años del triunfo ante la Alemania nazi.

En su primer acto público después de haber vencido ampliamente en las presidenciales francesas, Macron acudió al acto de homenaje invitado por quien será su antecesor una vez se formalice el traspaso de poderes, programado para el próximo domingo.

Bajo el emblemático Arco del Triunfo, el socialista Hollande recibió con una sonrisa y un apretón de manos a Macron, al mismo que introdujo en el mundo de la política y al que nombró ministro de Economía entre 2014 y 2016.

La gobernación de Macron dependerá de las elecciones legislativas del 11 y 18 de junio. Que salga un Parlamento afín a sus reformas o no será crucial para que pueda poner en marcha su programa.

Aunque el triunfo de Macron resultó más holgado de lo previsto (dos de cada tres votantes franceses le escogieron), la alta abstención (25,44%) y el inédito porcentaje de votos blancos y nulos (11,47%) empañaron su elección.

El descontento popular ya se hizo sentir la misma noche de su elección, cuando varias centenas de manifestantes mostraron su desacuerdo con su victoria.

Resultado de esta protesta, la policía arrestó preventivamente a nueve manifestantes.