COLPRENSA | LA PATRIA
Una confesión manuscrita de un soldado japonés de la Segunda Guerra Mundial describe cómo las tropas quemaron cerca de 100 casas en la provincia de Shandong, este de China, en septiembre de 1941, lo que provocó que unos 50 civiles chinos murieran quemados dentro de sus hogares.
La Administración Estatal de Archivos (AEA) de China publicó hoy la confesión de Bunpei Nozawa.
Nozawa, nacido en 1920, se unió a la invasión japonesa en 1940 y fue capturado en China en agosto de 1945.
El criminal recordó que entre los civiles muertos en el incendio se encontraban ancianos y niños.
El japonés escribió que él mismo quemó dos casas y que en una de las habitaciones se encontraba una anciana recostada en su cama.
Nozawa también confesó múltiples casos de violación y asesinato de septiembre de 1941 a mayor de 1945.
En uno de los casos más graves, que ocurrió en enero de 1945, el comandante del batallón ordenó a los soldados que atacaran a campesinos, 20 de los cuales fueron asesinados, escribió. Dos de ellos fueron asesinados bajo su orden directa.
La confesión de este japonés es la vigesimoséptima de una serie de 31 declaraciones por escrito presentadas por criminales de guerra publicadas en el sitio de internet de los AEA en conmemoración del 70° aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial.
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