LA PATRIA | MANIZALES
Luis Enrique Toro Murillo, quien hizo parte de las Auc del Magdalena Medio y se desmovilizó, quería sacar en limpio a su hermana, Carmela, y a Ninny Jhoana Rentería Rueda.
El sujeto, apodado Jabalí, aceptó el jueves cargos por diferentes delitos, al ser el líder de una banda que se autodenominó Nuevas Autodefensas o Marqueteños, que llevó entre 2020 y 2021 inseguridad al oriente de Caldas, especialmente Marquetalia y Samaná.
Cuando le dio el sí al juez se alargó en su intervención y expresó que ni Carmela, ni Ninny Jhoana tenían relación con ese entramado delictivo. El juzgador le explicó que en esa etapa procesal solo estaban verificando el allanamiento a cargos. Nada más.
Minutos después, el togado les hizo la misma pregunta a ambas mujeres y ellas sin titubear aceptaron los delitos y esperan sentencia como cómplices. En este mismo proceso condenarán también a Luis Carlos Bedoya Ospina, alias Samaná (otro desmovilizado), y Juan Carlos Córdoba López, apodado Comando o Juancho.
A los hombres los acusaron por concierto para delinquir agravado, extorsión agravada, desplazamiento forzado, utilización de prendas de uso privativo, uniformes e insignias; y tráfico, fabricación y porte de armas de fuego.
Cuando los capturaron les encontraron armas, cartuchos, prendas y material de intendencia de uso privativo de las Fuerzas Militares, y teléfonos celulares.
Estas aprehensiones se dieron luego de que tres personas, habitantes del oriente caldense, denunciaron que eran víctimas de extorsiones y amenazas, y pagaban entre $100 mil y $500 mil de vacuna.
Durante 7 meses de investigación se evidenció un caso de un prestamista de Marquetalia, quien aseguró que Comando se movilizaba con unas 15 personas por las veredas del municipio, usando uniformes de la Fuerza Pública y armas de fuego.
Según narró, en varias oportunidades recibió llamadas en las que le exigían vacunas a cambio de no hacerle daño.
Los pagos debían hacerlos en una casa de la vereda La Florida, en donde vivía uno de los delincuentes, con su compañera sentimental, Ninni Jhoana.
Otro afectado fue un minero, quien denunció que un día mientras trabajaba sacando oro del río llegaron varias personas que se identificaron como integrantes de las Auc. Le exigieron la entrega de dos gramos de oro semanal.
Incluso algunas víctimas tuvieron que desplazarse del sitio donde vivían, ante las amenazas por el no pago del dinero exigido. Todo esto ocurría, mientras las autoridades de Caldas negaban una y otra vez que en el departamento hubiese grupos ilegales.
El juez aclaró el jueves que a los procesados se les reconoce descuento de hasta el 50% porque aún no se ha presentado la acusación y por extorsión solo porque indemnizaron a las víctimas reconocidas en este proceso, que son 5, según se explicó en la audiencia. Ellas recibieron $24 millones, entre todas, como se verificó con documentos firmados por los afectados y telefónicamente durante la diligencia.
La pena para los hombres se conocerá el 20 de octubre y sería de unos 8 años de prisión. El 9 de noviembre, el abogado de las mujeres demostrará por qué merecen la prisión domiciliaria como cabeza de hogar. Su sentencia podría ser de 2 años.
Fotos | LA PATRIA
Luis Enrique Toro Murillo, de 38 años; Luis Carlos Bedoya Ospina, de 45; y Juan Carlos Córdoba López, de 32; pagarán por concierto para delinquir agravado, extorsión agravada, desplazamiento forzado, utilización de prendas de uso privativo, uniformes e insignias; y tráfico, fabricación y porte de armas de fuego.
Carmela Toro Murillo, de 34 años, y Ninny Jhoana Rentería Rueda, de 33, serán sentenciadas por concierto para delinquir agravado y extorsión agravada.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015