9 centrales de sacrificio de Caldas están en riesgo de seguir cerradas por no cumplir requisitos del Invima

MIGUEL ORLANDO ALGUERO

LA PATRIA | MANIZALES

Anserma, Pácora, Samaná y Marquetalia fueron los primeros municipios de Caldas en obtener el visto bueno del Invima para operar sus centrales de sacrificio. A ellos se sumaron Manzanares y Supía en el segundo semestre de este año.

El 16 de julio, en la primera entrega del informe especial que publicó LA PATRIA sobre los mataderos del departamento, bajo el nombre Mataderos: "Mucha inversión, poco sacrificio", el secretario de Agricultura, Carlos Alberto Ramírez, anunció la visita del Invima para agosto con el objetivo de tener completo el trabajo de revisión y preparación y finalizando el año tener abiertas todas las plantas. "Además, finalizando agosto pretendemos que empiecen a funcionar las de Supía, Aranzazu, Manzanares y Filadelfia".

De esta promesa solo se pusieron en marcha Supía y Manzanares. Todavía Aranzazu, Filadelfia, Chinchiná, Salamina, Pensilvania, Norcasia, Aguadas, La Merced y Palestina siguen cerradas y sin operar, y a la espera de la visita del Invima. "Si aún no cumplen, permanecerán cerradas hasta que logren las adecuaciones requeridas", insistió el Invima.

Aval

El aval del Invima corresponde a los requisitos establecidos por el Decreto 1500, el cual exige como mínimo el 60% del cumplimiento para la reapertura. Pero esta exigencia ya subió y para el próximo año será del 75%, confirmó el secretario de Agricultura.

La fecha límite era el 5 de noviembre para que estas centrales solicitaron la visita, la duda que se genera entre algunos diputados es que si no se pudo con el 60%, cómo hará la Secretaría y esas alcaldías para alcanzar el 75%.

"Si solamente pudieron cumplir 6 de 15 centrales con el 60%, será mucho más difícil que en el 2022 cumplan los requisitos del 75%", señaló Jorge Hernán Aguirre del Partido Liberal.

Razones

Aguirre consideró tres razones: la primera tiene que ver con que el Departamento está ad portas de sobrepasar la barrera de la Ley 617, que limita los gastos de funcionamiento.

Segundo, la mayoría de los municipios son de sexta categoría, por lo que sus recursos para culminar las obras de los mataderos serán exiguos y, tercero, la Secretaría responsable de inyectar recursos y apalancar proyectos para que las centrales salgan adelante es de las que menos tiene asignación presupuestal para el 2022. "Agricultura incluso tiene menos recursos que lo que gastará la Gobernación en servicios generales el próximo año, para hacer la comparación".

El diputado ve con pesimismo el panorama en estas condiciones, aún más cuando muchas de esas plantas ya operan, pero la Gobernación no garantizó el sostenimiento, ni funcionamiento. ¿Qué será del futuro de esas centrales?, ¿habrá detrimento patrimonial?, ¿Contraloría investigará este proyecto?, se preguntó el corporado.

A estos interrogantes se suma el diputado Camilo Gaviria, quien pregunta ¿dónde ha estado la Contraloría este tiempo para tomar una decisión de fondo en este caso?

"Se vienen invirtiendo recursos desde hace cuatro años, desde la Gobernación de Guido Echeverri y ahora con Luis Carlos Velásquez, y nada que se finalizan las obras y entran en operación las centrales. Llevamos dos secretarios de Agricultura en esta Administración y nada que hay resultados. ¿Cuál es el compromiso para que los mataderos cumplan con las normas del Invima?, ¿cómo es que se gastan todo esos recursos y 9 centrales no cumplen con los requisitos?".

Para Gaviria, el tema de fondo, es que estas centrales no tienen asegurada su sostenibilidad y viabilidad económica a largo plazo.

Visita

El secretario de Agricultura precisó: "Luego del 5 de noviembre cambió la normativa, por eso el paso del 60% al 75% para pasar el visto bueno. Estamos pendientes para que el Invima el año entrante nos visite. No hemos parado de continuar las adecuaciones de la mano de las alcaldías para que las plantas de sacrificio estén en óptimas condiciones. Todos los municipios pendientes ya se inscribieron para las visitas del Invima".

Sobre los recursos no ejecutados de los mataderos, Ramírez explicó que hay unas partidas de unos contratistas a los que se les debe plata de las plantas de beneficio de la vigencia 2020. Dice que esto hace parte de un proceso de la Contraloría y que está pendiente el informe.

Recuento

*En un principio para las obras de modernización y mantenimiento, que aprobó en el 2018 la Asamblea para 18 plantas de beneficio inicialmente, se pidió un empréstito por $12 mil 500 millones.

*A ese monto se sumaron $1.950 millones de la Secretaría de Agricultura y $1.100 millones de Corpocaldas, para un total de $15 mil 550 millones iniciales.

*Después el proyecto se concentró en 15 plantas y las labores se iniciaron en el segundo trimestre del 2019.

*Los peros a este proyecto, que se autorizó en la Administración de Guido Echeverri Piedrahíta y de Ángelo Quintero Palacio, como secretario de Agricultura, pasan por los retrasos, la mora de los contratistas, el cambio de administraciones municipales y departamental, la pandemia, la falta de garantías y las bajas calificaciones del Invima en algunas intervenciones para que entren a funcionar.

* A mediados del 2021, la inversión total alcanzaba los $20 mil 109 millones.

Invima

Carlos Alberto Robles Cocuyame, director de Alimentos y Bebidas del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), indicó que hoy Caldas cuenta con 8 plantas de autoconsumo en operación, más dos recientemente. La dificultad de las demás se centra en inconsistencias en el manejo de residuos sólidos líquidos y agua potable, control de plagas y capacitación del recurso humano en los establecimientos. Eso unido a problemas de infraestructura, instalaciones sanitarias y dotación adecuada de equipos para acondicionar las plantas.

Más recursos

El alcalde de Supía, Marco Antonio Londoño, resaltó a su municipio como uno de los 11 mataderos que logró la calificación positiva del Invima para habilitar la central. "Esta camino fue difícil, la exigencia cada vez es mayor, le pedimos encarecidamente a la Gobernación que aumente el presupuesto para la Secretaría de Agricultura y podamos en las vigencias 2022 y 2023 llevar a estas centrales a un cumplimiento mayor".

Agregó que es vital el acompañamiento del Departamento para hacer las inversiones que faltan y pedirles a los contratistas, a través de los entes de control, que culminen lo que hace falta para terminar el proyecto.