DIEGO FERNANDO HIDALGO
LA PATRIA | MANIZALES
Venezuela se asoma a un escenario sin el presidente Hugo Chávez, un panorama que dejó servido él mismo con el nombramiento del vicepresidente Nicolás Maduro como su sucesor antes de ser operado de un cáncer, el pasado martes.
Todo se ha vuelto más relevante por estos días en el vecino país y hasta las elecciones regionales de hoy, que tuvieron una campaña anodina y gris, adquirieron una nueva dimensión ante la perspectiva de que se abra la carrera por la candidatura opositora en unas elecciones adelantadas, en caso de que Chávez no pueda asumir en enero.
Cuatro analistas consultados por LA PATRIA indicaron que se daría una lucha entre los herederos del poder chavista, lo que podría ser aprovechado por la oposición, pues no poseen la imagen que representa Chávez. Así mismo, la situación les abriría el camino a nuevas figuras políticas que tendrían la posibilidad de mostrarse. Este es el panorama que plantean los expertos.
Pelea por la herencia política*
La desaparición, por incapacidad o fallecimiento de Chávez, es decir, del caudillo, significará, a pesar del acto de sucesión realizado el fin de semana, una confrontación entre las diversas corrientes que forman el chavismo por el control de la herencia política, por el control del movimiento y el control del aparato del Estado venezolano.
Cada facción saldrá a reivindicar la pureza de sus pensamientos y de sus acciones con respecto al referente único que es Chávez. Dada la ambigüedad, propia de todos los caudillos, las corrientes que interpretan justamente el pensamiento del fundador se ubicarán en todo el espectro político y saldrán a relucir las descalificaciones.
A esa inestabilidad doméstica se sumarán factores como los intereses de estados que consideren que se encuentren más representados por una que por otra fracción: Cuba, Rusia, China y tangencialmente Irán.
*Benjamín Herrera Chaves, magíster en política económica y docente de la Universidad Javeriana.
Se dividirían las fuerzas chavistas*
Venezuela entraría en un proceso de relevo de un líder carismático que, como todos los de esa clase, concentran mucho poder y son bastante difíciles, pero no imposibles, de reemplazar. Se haría una transición hacia el grupo político que él ha venido representando y consolidando: el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Chávez ha ungido en vida a su sucesor, Nicolás Maduro, quien en principio debería ser el guardián y continuador de la Revolución Bolivariana iniciada por Chávez.
Los problemas pueden surgir por posibles enfrentamientos de líderes dentro del chavismo y con líderes de la oposición. El líder dentro del chavismo, que en principio no participaría de la sucesión de Maduro, es el poderoso presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.
En todo caso, de darse esta confrontación y hacerse muy explícita, esto dividiría las fuerzas chavistas que abrirían paso a un eventual triunfo del innegable líder de la oposición, Enrique Capriles. Esto último, no sería ideal para quienes hoy representan el status quo político en Venezuela. Mantener el poder amasado por Chávez por 14 años será el motivador de conducta principal de los chavistas de hoy.
Se amañarán, se harán acuerdos de repartos de cuotas de poder, de tal forma que al final se logren balancear las fuerzas políticas en Venezuela. Otro importante jugador en este proceso de relevo es el ejército venezolano, que mantiene un férreo silencio y aparenta obediencia y lealtad incondicional al régimen actual. No es claro de momento ningún ascendiente definitivo ni de Maduro ni de Cabello sobre las fuerzas armadas.
*Álvaro Turriago Hoyos, profesor de la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de la Sabana.
Lo puede aprovechar la oposición*
Una Venezuela sin Chávez podría plantear situaciones de crisis de gobernabilidad, en manos de quien suceda al mandatario, bien sea el canciller Maduro, o el vicepresidente Diosdado Cabello.
Es evidente que estas dos figuras, fuertemente ligadas al proyecto chavista, no logran trascender el liderazgo y el carismo que encarna Chávez, por lo que es posible que esa situación de sustitución pueda ser aprovechada por la oposición que viene ganando terreno, y generar situaciones críticas.
El otro elemento a contemplar, y que podría hacer menos caótica una situación de gobernabilidad en Venezuela, tiene que ver con el papel que puedan jugar las FF.AA. para garantizar la que la inestabilidad y los enfrentamiento no agoten la transición hacia un modelo de un sistema de partidos abierto, fluido y respetuoso de las reglas de juego en la dinámica de participación de las fuerzas política y organizacioneas de la sociedad venezolana.
*Rodrigo Santofimio Ortiz, docente Departamento de antropología y sociología de la Universidad de Caldas.
Daría espacio a nuevas figuras*
Venezuela sin Chávez podría verse mucho más activa desde el punto de vista político. Esto es, con la ausencia del ícono en el que se ha constituido el presidente, habrá mayor espacio en el espectro político para que nuevas figuras aparezcan y traten de acaparar los electores. Por supuesto esas nuevas figuras surgirán tanto de las propias filas chavistas como de grupos opositores.
Así, habrá una especie de apertura del mundo político donde personajes de los que se había escuchado menos busquen una proyección mayor. Seguramente la oposición querrá arremeter y el gran desafío de Maduro y los demás sucesores será el de mantenerse en el poder y demostrar que su propuesta trasciende al caudillo.
*Sebastián Líppez-De Castro, director carrera de ciencia política, Facultad de ciencias políticas y relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana.
Hay elecciones
12 mil 784 centros de votación se instalaron en Venezuela para las elecciones regionales de hoy. Están llamados a las urnas 17,4 millones de venezolanos para elegir a los gobernadores de 23 estados del país entre 135 candidatos oficialistas y opositores.
Entre los candidatos está el opositor Henrique Capriles, que fue derrotado por el mandatario Hugo Chávez en las presidenciales del 7 de octubre, y peleará ahora por ser reelegido gobernador del estado Miranda con el exvicepresidente chavista Elías Jaua.
La oposición controla actualmente las gobernaciones de siete de los 23 estados del país.
El dato
El 10 de enero se debe posesionar Chávez para el periodo constitucional 2013-2019. La Constitución prevé comicios en 30 días tanto si el presidente no puede asumir, como si fallece en los cuatro primeros años del mandato.
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