Transporte escolar en Supía (Caldas), casi que no llega

Óscar Veiman Mejía

LA PATRIA I Manizales

Adelaida, quien tiene un hijo en el Instituto Supía, siente un respiro para la seguridad de su hijo y sus gastos diarios. Ella vive en la vereda Camaguada. Llevaba ocho semanas sacando de su bolsillo para pagar el transporte escolar del estudiante. El municipio, en el occidente de Caldas, estaba sin este servicio desde principio de año.

Nhora Luz, madre de Manuel, asegura que se quitan otros pesos de encima. 1. Se asegura que los niños lleguen a clase a tiempo. 2. Uno queda más tranquila en casa sabiendo que no están por ahí solos en caminos. 3. En invierno también pueden ir a estudiar, pues los recoge al frente o cerca de las casas”.

Apenas la semana pasada comenzaron con el transporte para cerca de 636 alumnos priorizados de la zona rural en 29 rutas con el propósito de atender seis instituciones educativas. La señora y otras recuerdan que sin el transporte los niños caminaban largos trayectos, en ocasiones solos.

Para la familia de Adelaida y para las de otras madres el impacto es inmediato en la economía. Un ama de casa dice: "Los niños estudian en el colegio de Sevilla. Gastamos $12 mil 500 semanales en otro transporte".

Pegados

La situación se originó luego de que la Alcaldía publicó las condiciones de la licitación, con la cual buscaba contratar el servicio para cerca de 600 alumnos del área rural.

Sin embargo, los precios por pagar no convencieron a Cootranslavega, la empresa que el año pasado ganó la licitación y transportó a niños y jóvenes en unas 30 rutas.

Acuerdo

Lo anterior llevó a abrir una nueva licitación con valores ajustados. Las partes estuvieron de acuerdo. La Alcaldía indica: "Después de superar los obstáculos de principio de año y con una inversión de más de $200 millones, se dio inicio al transporte escolar en el municipio".

De acuerdo con el contrato, publicado en el Secop 1, la Alcaldía aporta $180 millones; el Resguardo Cañamomo Lomaprieta, $21 millones 700 mil, y el Fonpet, $8 millones.

Nhora Luz, de la vereda Brasil, describe lo que vivieron en estos meses con su hijo Manuel: "Debíamos andar como 45 minutos hasta un punto llamado Puente Cemento, en la carretera central Supía-Riosucio. Allí esperábamos a que lo recogiera un bus intermunicipal o un jeep para ir al colegio en zona urbana de Supía".

La Administración municipal complementa: "Sabemos que la permanencia en las instituciones depende de esta y otras garantías, por ello, seguiremos trabajando por nuestros niños, para hacer de Supía Productiva y Educada".

Los responsables

En los municipios caldenses, distintos de Manizales, es tradicional que el transporte escolar en el primer semestre sea financiado por las alcaldías. Para el segundo semestre se cuenta con apoyo de la Gobernación.