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Fusionar las tradiciones artesanales de Caldas con el diseño moderno es la propuesta del arquitecto Santiago Dussán para la región. Una línea de muebles es el primer intento de rescatar el trabajo de artesanos y sus materias primas.
La Secretaría de Desarrollo Económico invitó a siete diseñadores manizaleños, entre ellos Santiago, para recorrer algunos pueblos. "Esta alianza se materializó en un proyecto mobiliario. Las empresas creativas conocieron y diseñaron piezas y prototipos artesanales confeccionadas, por ejemplo, con la iraca de Aguadas, el tejido de ojo de buey de Aranzazu, el telar de lana de ovejas de Marulanda", comenta Santiago, quien hace un año y dos meses montó la oficina de su empresa en Manizales, que lleva su mismo nombre.
Señala que la tarea del diseñador es interpretar la artesanía para conjugar en un solo elemento varias ideas y no cambiar la tradición. "Es una forma de contemporanizar las costumbres artesanales, porque es imposible cambiar el tejido a siete lanas, que lleva 40 años, por uno de nueve. La silla Pepe es la primera muestra de la unión de artesanos, diseñadores, tapiceros, tejedores y ornamentadores".
Regreso
La Casa D o la casa del diseño, ubicada en Palermo, fue una razón para que Santiago regresara a Manizales luego de vivir en Bogotá y en Barcelona, donde estudió la maestría en Diseño de Interiores. "Este lugar nació como una casa donde varias empresas creativas se unen para crear sinergias y presentar proyectos. Allí también se originaron muchas ideas para acoplar la tradición con la modernidad", dice el arquitecto.
Cree que su generación, la que tiene entre 30 y 40 años, que se fue de la capital caldense a estudiar por la crisis económica del 98, son los encargados de tomar las riendas de la ciudad en este momento. "Se están regresando con sus ideas de negocios y con mucho conocimiento para aportarle a Manizales. La ven como una ciudad en la que pueden desarrollar sus proyectos, acompañar procesos sociales, crear empresas y generar emprendimiento".
Santiago quiere, desde la Casa D, cambiar a la ciudad, que esa generación se ponga el overol e impulse el desarrollo. En dos años diseñó 11 restaurantes en la ciudad. Insiste en que Manizales debe rescatar las ideas creativas porque, según él, las empresas de diseño están en otros lugares y acá hay pocas.
Experiencia
Santiago es hijo de padres arquitectos, lo que hizo que desde pequeño se inclinara por esa profesión y la estudiara en la Universidad Nacional. "Mis fotos de niño son con un casco y lo que veía eran planos, lápices y colores. Mi amor por el diseño nació por ellos. A mis tres años ya hacía algunos intentos de diseños".
Recuerda que en vacaciones acompañaba a sus papás en las obras. "El olor a cemento o tierra mojada es un placer culposo. Me emocionaba cuando vaciaban o levantaban paredes".
Desde hace 15 años, cuando se graduó, ha realizado por lo menos 100 proyectos arquitectónicos. "No he pagado publicidad, mi trabajo se expande por el voz a voz. Lo que hago es cambiar la mentalidad sobre la estética y entender las necesidades de los clientes. A ellos les enseño que no se deben adaptar al espacio, sino que la arquitectura se debe adaptar al cliente".
Proyección
La empresa Santiago Dussán genera seis empleos directos y por lo menos 40 indirectos. Sus principales puntos de ventas son Bogotá, Medellín y Barranquilla. "Mi equipo de trabajo es completamente digital, porque todo lo hacemos vía WhatsApp, correo electrónico o videollamadas por Skype. Acá no sabemos que es imprimir en papel. La proyección para el próximo año es expandir el diseño en Manizales para que las constructoras dejen de hacer edificios feos como en los años 50".
Para él, Manizales es la ciudad del país que permite el emprendimiento. "Acá se apoya a las nuevas empresas, hay contactos y mejor calidad de vida, se pueden efectuar alianzas, el tiempo rinde, existen herramientas para inventar y transformar. En otras ciudades es imposible porque es muy caro por los impuestos y obligaciones fiscales", concluye.
Paso a paso
1. El proceso para crear o plasmar una propuesta de diseño empieza con una cerveza o un vino. Es una forma de romper barreras con el cliente y facilita la creatividad.
2. Durante el encuentro, Santiago escucha las necesidades del cliente para luego entenderlas.
3. Ambos se van con tareas: buscan referencias de tendencias en diseño y moda.
4. Se vuelven a reunir y con lo realizado, interpreta la necesidad en colores, espacios y texturas.
5. Forma un look o propuesta de referencias.
6. El cliente evalúa la propuesta. Sugiere cambios.
7. Cuando acepta, Santiago y su equipo montan los diseños en renders.
La Casa D
En ese lugar se creó una sinergia de emprendimiento de nueve empresas:
* La Jaus, agencia cultural.
* Tanque, agencia de publicidad.
* Petit carnaval, organizadora de bodas para extranjeros.
* Palmarum, organizadores de eventos.
* Café Villa Clara, exportadora a Taiwán.
* El Pepe, un bar.
* Supermercado Super Inter.
* Olivander, agencia de 3D.
* Santiago Dussán, arquitectura y diseño interior.
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