JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
El secretario de Infraestructura de Caldas, Luis Alberto Giraldo, hizo ayer un llamado de atención, luego de inspeccionar la posible vía alterna que se propuso ante el taponamiento de la vía La Quiebra de Vélez - Lisboa. "Es estrecha, resbalosa, pendiente, con poca capacidad y especificaciones técnicas. Por eso no la recomiendo y si se utiliza es solo para emergencias".
La ruta que se planteó pasa por una carretera desde la entrada de la finca El Colibrí hasta la Hacienda La Fonda, por la vereda El Guineo (ver infográfico).
La opción se propuso, luego del derrumbe que se presentó este fin de semana en la vía a Lisboa, a 2 mil 200 metros, después del primer daño que ocurrió hace un mes cerca del peaje de la Quiebra de Vélez.
"Por eso, después de la visita que hicimos, la decisión entre la Gobernación y la comunidad es concentrar nuestros esfuerzos para recuperar la vía principal, porque el trayecto que se planteó entre Colibrí y La Fonda es de muy malas condiciones y solo vehículos con doble tracción pueden pasar por allí, además hay un puente muy deteriorado".
También se puso una restricción para quienes circulen por este sector. Solo entre las 6:00 a.m y 5:00 p.m o 6:00 p.m, y paso solo para vehículos pequeños. "Trataremos de habilitarla hasta donde sea posible con maquinaria, pero no va a cambiar sustancialemente", aseguró.
Seis afectaciones
En la inspección que se efectuó ayer, se determinó que son seis los puntos críticos en la carretera a Lisboa, ubicados sobre la Falla de Romeral. El problema se aumenta por las continuas lluvias que vienen desde la parte alta del talud, lo que genera derrumbes principalmente en zona boscosa.
Se decidió ubicar combos de maquinaria para tratar de pasar por un lado del actual derrumbe, con el fin de que en pocos días se rehabilite el paso.
Hoy se contará con otra comisión que recorrerá el sector para revisar la quebrada y la recuperación del paso.
El gavión
La secretaría de Infraestructura, destacó el avance en la construcción del gavión que se construye cerca del peaje, y que busca recuperar la carretera, después de derrumbe que afectó la mitad de la carretera, por lo que se restringió el paso volquetas que bajan hacia San Gabriel y el Faro para traer material del río (arena, piedras y balasto).
Ana Irene Florez, habitante de la vivienda número 16 que está al borde la carretera afectada, al lado derecho, bajando hacia Lisboa, celebró la construcción de la obra, pero pidió otra revisión. "Estamos viendo nuevas grietas más arriba, cerca del peaje, en el restaurante Sazón y Sabor".
Alonso Muñoz Cuervo, habitante del caserío Piedra Azul, también pidió una revisión integral y un trabajo de fondo para toda esta vía, ya que asegura que el problema es continuo y no se pueden seguir haciendo solo remiendos, cuando se presenta algún daño.
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