La plata del plebiscito, otra polémica

ADRIANA OSORIO

NEGOCIOS | LAPATRIA

Una inversión necesaria y trascendental. Esta es la opinión de líderes y expertos acerca de los $280 mil millones que, según la Registraduría Nacional, costará el plebiscito del próximo 2 de octubre.

Aunque cada cifra que se publica sobre el costo de una elección en Colombia genera polémica, sobre todo si se trata de una jornada atípica o de una consulta ciudadana, para congresistas, expertos y líderes, no se trata de un gasto, sino de una inversión para el futuro del país.

El politólogo César Caballero, gerente de la firma encuestadora Cifras y Conceptos, cree que la jornada es una tarea necesaria porque de aprobarse el Sí, se podrán resolver problemas que hasta ahora no han tenido solución.

"La democracia para funcionar necesita recursos y me parece que la Registraduría ha hecho un trabajo logístico para que los colombianos podamos tomar una decisión importante en un tiempo récord. Es muy razonable la cifra", manifestó.

Una mirada similar expresó el representante a la Cámara por Caldas, Hernán Penagos Giraldo, del Partido de La U. Para él, el costo del plebiscito, como el de cualquier elección, se justifica en función de la democracia.

Penagos asegura que la jornada que se acerca es fundamental para el país, pues es la oportunidad para que los colombianos tomen una decisión que en el pasado tomaron los gobernantes, sin contar con la ciudadanía.

"Creo que lo que se haga frente a la paz no tiene precio", dijo. Aclaró que no tiene elementos para decir cuánto cuesta en Caldas el proceso, aunque supone que es similar al de elecciones de gobernadores o congresistas.

La Registraduría explicó que no tienen la cifra que se gastará en cada departamento, pues según explican la contratación se hace al nivel nacional, no por regiones.

El gasto del Gobierno

Para el senador caldense Carlos Felipe Mejía, del Centro Democrático, el costo de la jornada es lo de menos. "Si el presidente cita a un plebiscito y se cumple con los trámites, pues bueno, hay que ejercer la democracia. En este caso la cifra es muy alta para la situación en la que está el país, pero tampoco se puede decir que no se haga", afirmó.

Lo que realmente le preocupa es el dinero que ha gastado el Gobierno Nacional en la publicidad que ha hecho durante estos años para, según él, manipular a los medios de comunicación y al pueblo con la paz, y hacerles creer a los colombianos que hay un dilema entre paz y guerra. "Esto ha costado cerca de $2 billones en tres años y eso afecta de sobremanera la economía, teniendo en cuenta que el presupuesto de la Nación está desfinanciado en cerca de $30 billones y se debe, en parte, a que se ha descuidado el sector económico y la atención se ha centrado en el acuerdo".

Insiste en que se quiere confundir a la ciudadanía, pues lo que se debe decidir es si se está o no de acuerdo con lo que han firmado las Farc y el Gobierno en La Habana, y no necesariamente si se está de acuerdo con la paz. "Con la paz estamos de acuerdo todos los colombianos".

Uso de recursos públicos

Otro debate que se genera en torno a los costos del plebiscito tiene que ver con la autorización para que los funcionarios del Estado utilicen los recursos públicos en la campaña.

El representante Penagos recordó que la Corte Constitucional dio luz verde para que los funcionarios, especialmente alcaldes y gobernadores, divulguen los acuerdos.

"Los funcionarios públicos también pueden hacer campaña por el Sí o por el No, porque así lo dice la Corte Constitucional. Estoy de acuerdo, porque un plebiscito es una pregunta que le hace el gobernante a la ciudadanía y es natural que los funcionarios tomen partido".

Con ello no está de acuerdo César Caballero, quien cree que el presidente Juan Manuel Santos debió aclarar que los recursos se usen para hacer pedagogía de los acuerdos y enseñarles a los ciudadanos en qué consisten. "Lo que no me parece es que se utilicen para alguna de las dos alternativas, el Sí o el No, porque ya el Consejo Electoral les dio unos topes a los comités de campañas", manifestó el politólogo.

La participación de funcionarios y el uso de los recursos del Estado para difundir el plebiscito es para Carlos Felipe Mejía un descaro.

El senador del Centro Democrático tilda al presidente de dictador. "Con tal de ganar el Sí en el plebiscito y lograr un premio nobel o reconocimiento internacional, es capaz de hacer lo que sea, incluso poner a los funcionarios y los recursos para hacer campaña", expresó.

Mejía es enfático en que, como lo dice la Constitución y la ley, los funcionarios deberían comportarse como en todas las campañas políticas, con el fin de que haya más garantías para quienes están con el No. "Entre otras cosas, el presidente impidió que se utilizaran recursos para el No y todo el aparato estatal está presionado para que esté a favor del Sí".

Santos aseguró que los funcionarios pueden hacer divulgación y explicación de lo que significa la paz para sus regiones, de lo que significan los acuerdos y el impacto.

Ese mensaje se reitera en la directriz, que especifica que es una obligación de los funcionarios suministrar información relacionada con la política de paz del Gobierno, incluido lo que tiene que ver con el proceso de paz y la refrendación de los acuerdos.

Sobre el voto, reiteró que pueden hacer campaña y votar el 'Sí a la paz', pero lo que no se puede hacer es obligar a un subalterno a votar de una u otra forma. "Nadie puede constreñir a nadie en materia de cómo votar; no se pueden cambiar partidas presupuestales para promover el Sí o el No”.

Marino Largo, fiscal CUT

Estamos comprometidos con el plebiscito y ojalá que el voto sea por el Sí. Desde las centrales obreras sabemos que tenemos que hacer fuerza para que la paz sea realidad. Los entes a los que les corresponde fiscalizar el uso de los dineros, como las contralorías, deben garantizar que el recurso sí se invertirá de manera consciente.

Guillermo Arango, de Básculas Prometálicos

Estoy de acuerdo con que se utilice ese monto. Me parece que usar $280 mil millones para un plebiscito para asegurar la paz y la tranquilidad de Colombia es regalado. Es la única manera de ratificar lo que creemos los colombianos.

$443 mil millones costaron las elecciones de alcaldes, gobernadores, concejales, diputados de asambleas e integrantes de las Juntas de Acción Local en todo el país, que se realizaron el 25 de octubre del año pasado, según la Registraduría Nacional.

En qué se gastan

Los $280 mil millones que costará el plebiscito se utilizan, como en cada jornada electoral, se utilizan para lo siguiente, según una exfuncionaria de la Registraduría Nacional:

- Contratación de personal.

- Telecomunicaciones para la transmisión y consolidación de datos.

- Papelería: imprimir los cerca de 34 millones 700 mil tarjetones y los formularios de los jurados.

- Transporte: del personal y de los jurados de votación.

¿Está de acuerdo con que se utilicen $280 mil millones para llevar a cabo el plebiscito?

Santiago Usme, estudiante universitario: Sí estoy de acuerdo, siempre y cuando de verdad haya paz. Es más la plata que se gasta en la guerra que en la paz. Es una suma grande, pero en el futuro el país se ahorrará dinero.

Delio José López, impresor: No estoy de acuerdo. Se está negociando con delicuentes y no creo que valga la pena. Hay muchas necesidades, como la desnutrición en La Guajira.

Alejandro Giraldo, conductor: No estoy de acuerdo, porque es invertir el dinero en la guerrilla.

Luis Restrepo, vigilante: Creo que es importante hacer la jornada porque es algo bueno para el país.

Miguel Antonio Pabón, oficial de construcción: Sí, claro, estoy de acuerdo, porque es para la paz.