NEGOCIOS | MANIZALES
El pasado 15 de mayo se cumplieron cinco años de la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC) de Colombia con Estados Unidos.
El balance después de este tiempo es agridulce. El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo destaca que el número de empresas exportadoras hacia ese país se incrementó en 17,5% al pasar de 3.030 a 3.565, y las exportaciones de bienes no minero-energéticos crecieron 12,3%, entre 2012 y 2016, sumando más de US$3.800 millones en el último año.
Para los exportadores el balance no es tan optimista, pues las dificultades de entrar al mercado les incrementa los costos del producto.
Según cifras del Dane, las ventas hacia ese mercado cayeron a la mitad al pasar de US$21.969 millones en el 2012 a US$10.023 millones el año pasado.
De acuerdo con el presidente de Analdex, Javier Díaz, Colombia no ha aprovechado el TLC, pues aunque las exportaciones tradicionales han crecido, no lo han hecho al ritmo esperado del 25%.
Lo mismo opina Sergio Clavijo, presidente de Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF). "Antes exportábamos un total de US$60 mil millones y el último valor es de US$33 mil millones y de pronto este año se aumenten a US$36 mil millones, pero la diversificación anda muy mal".
Clavijo dice que no hay nada que celebrar durante estos cinco años del acuerdo. "No hemos sido capaces de llegar siquiera a Miami, aunque es el mercado natural, pues estamos a dos horas y media entre Barranquilla y Miami. De aquello, de valor agregado, pocón, pocón. Así que cuando me dicen que esté tranquilo, que ya vamos a conquistar a Australia, yo les regalo un mapamundi, y les pregunto ¿saben dónde está Australia?, por qué no se ocupan más bien de Miami, a ver si somos capaces de exportar algo de valor agregado".
El panorama en Caldas
En Caldas, de acuerdo con información de Procolombia, el TLC promovió la diversificación de las exportaciones diferentes al petróleo y la minería, llegando a US$148,7 millones en 2016 y creciendo un 9,1% con respecto al 2015.
“El TLC con Estados Unidos es una herramienta que está facilitando más negocios a largo plazo. En el caso de Caldas pasó de vender café a flores, confecciones como camisetas y pantalones, frutas como mango, y artículos del hogar”, aseguró Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia.
El último informe de exportaciones del DANE indica que las exportaciones de Caldas tuvieron un incremento de 69,6% en el primer trimestre del año, frente al mismo periodo del 2016, pasando de US$120,9 millones a US$205 millones. Lo anterior explicado por el aumento de las ventas externas de café sin tostar descafeinado o no, que contribuyó con 46,3 puntos porcentuales. En el 2012, la cifra fue de US$ 162,9 millones.
Así mismo, Jaramillo destacó que con la entrada en vigencia del acuerdo la inversión de Estados Unidos en Colombia creció un 41% si se compara con el promedio anual de los cinco años previos al tratado. "Estados Unidos es el socio comercial número uno de Colombia, el primer destino de nuestras exportaciones, ya que mandamos allí más del 25% de nuestros productos y servicios, y recibimos el mayor porcentaje de inversión de ese país. El TLC ha sido primordial para que esas cifras sean una realidad", resaltó.
Entre los productos exportados por Caldas al país norteamericano están barriles, cubas, tinas y demás manufacturas de tonelería y sus partes de madera; cuchillos comunes de hoja fija, de metales comunes; papaya, sin cocer o cocidos en agua o vapor, y congelados.
Para Jaime Cortés, gerente de marketing de Skinco y Gyplac, en efecto existe una apertura que se percibe de manera general. "En el caso particular de la construcción y nuestros productos, nos hemos enfocado en el mercado nacional con mayor rigor, puesto que hay un importante auge por los productos y sistemas de la construcción en seco. El impacto de apertura de mercados hacia Estados Unidos no ha sido del todo efectivo, puesto que, a pesar del libre tratado, hay un elevado costo de pruebas técnicas y tramitología propia de la exportación, que incrementa sustancialmente el valor de nuestro producto para llevarlo".
Carlos Eduardo Sosa, gerente de Normandy, asegura que las exportaciones a ese país han crecido, esperando doblar las ventas este año. "En este momento estamos exportando dulcería, en ese sentido no hay ningún problema, pues no tenemos aranceles. Para nosotros el TLC no ha marcado la diferencia".
Recuperando espacio
De acuerdo con Hernando José Gómez, quien fue jefe negociador del TLC con EE.UU., en estos cinco años se ha logrado recuperar espacio en el mercado agrícola con relación a países como Argentina, Brasil y Canadá, igualmente dijo que algunas áreas como la maquinaria se han visto favorecidas.
"El arranque ha sido muy lento. Si bien tenemos un número adicional de exportadores y de productos, el proceso no ha sido tan rápido como quisiéramos. Por un lado, hay que adaptar una serie de productos, y por otro y cumplir ciertas reglamentaciones", señaló.
Agregó que tener este TLC es fundamental para seguir desarrollando la relación comercial con Estados Unidos,
atraer más inversiones y desarrollar nueva oferta.
Otro aspecto es el comercio electrónico. Según Gómez se ha beneficiado mucho y cada vez es más importante. "Ya hay empresas colombianas que venden a través de Amazon. Entre ellas, compañías de confecciones, muebles para armar, cueros, que logran conectarse con el consumidor final".
Por el lado del agro y la agroindustria, Gómez aseguró que hay buenas posibilidades para el aguacate hass, la papaya, la piña gold. "Lo que tenemos que hacer es organizar la cadena de exportación del producto agrícola, pero se ven cosas interesantes y con unos montos muy importantes", contó.
Una empresa caldense que destaca es Hada que hizo la tarea para entrar al mercado estadounidense y ahora exporta de una manera importante. "Es difícil entrar, pero una vez el exportador consigue el primer cliente se vuelve mucho más fácil. Se debe es trabajar con inteligencia de mercado, adaptar la oferta y lograr las certificaciones requeridas. Las empresas deben buscar sus compradores de acuerdo con su tamaño".
Los detractores
Los principales detractores del TLC fueron los sindicatos, que advertían una vulneración de los derechos laborales; el campo, que temía ser incapaz de competir con agricultores estadounidenses. El economista Mario Valencia , director del centro de consultoría de temas laborales Cedetrabajo, afirmó que el balance de estos cinco años de TLC es negativo, pues si no se contabilizan las exportaciones del sector minero-energético la balanza comercial entre Colombia y Estados Unidos arroja un resultado negativo de unos US$30.000 millones para el país, y resaltó que el campo ha sido un gran perjudicado, pues han aumentado las importaciones de productos que se pueden cultivar en el país y que están reemplazando la producción nacional.
Estados Unidos fue el principal destino de las exportaciones colombianas en lo corrido del año hasta marzo 2017 con una participación de 28,4% en el valor total exportado; le siguieron en su orden, Panamá, España, Turquía y Brasil.
Mincomercio también da como principal beneficio del TLC la consolidación de las preferencias arancelarias existentes en el acuerdo transandino de 2002 que permitió que más de 10.000 productos colombianos pudieran entrar al mercado estadounidense con arancel cero.
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